Con motivo de las celebraciones por el 10 de mayo, EL UNIVERSAL Querétaro se dio a la tarea de hacer visibles diversas realidades sobre la maternidad, como el caso de Rosa, una estudiante oaxaqueña de ingeniería industrial, quien viajó a Querétaro para realizar sus prácticas profesionales en una empresa automotriz; a partir de haber sentido unos malestares en el vientre, la joven de 21 años supo que tenía ocho meses de embarazo, y por ello, se vio obligada a poner una pausa en su proceso académico y profesional.
“Estaba desesperada, porque de toda mi familia, sólo mi hermano me apoyó. Con ayuda de él buscamos información en Internet y fue así que dimos con Vifac (Vida y Familia A.C.). Aquí he recibido atención psicológica, que me ha permitido asimilar lo sucedido, fortalecer mi autoestima y crear un nuevo proyecto de vida”, compartió con la voz entrecortada, y agregó que, pese a todo, ahora se siente más tranquila, feliz junto a su bebé y lista para salir adelante.
Vifac es una institución que desde hace 12 años acompaña a mujeres embarazadas en situación de vulnerabilidad durante todo su proceso de gestación, brindándoles atención médica, psicológica y capacitación profesional para que puedan insertarse en el campo laboral, después del parto.
Adriana Hernández de Duer, presidenta de Vifac Querétaro y Gabriela Rojo, coordinadora del área de adopciones de la organización, compartieron que desde 2006 han dirigido sus acciones a elevar la calidad de vida de quienes viven esta situación, por medio de un programa de atención integral, gratuita y confidencial, que abarca desde los aspectos físicos, hasta los laborales, psicológicos y emocionales.
“Nosotros dividimos la atención en tres grandes bloques. Primero, la parte material, que tiene que ver tanto con el albergue, el servicio médico (trámite del seguro popular y seguimiento médico puntual, hasta el nacimiento de sus bebés) como con el abasto de artículos de uso personal. Segundo, la capacitación para el trabajo, que incluye certificación en nivel primaria, secundaria o preparatoria y el desarrollo de habilidades remunerables a través de talleres como belleza, computación, costura y manualidades. Finalmente, en el bloque de formación, ellas reciben apoyo emocional por medio de sesiones psicológicas semanales, junto con talleres de autoestima, manejo de emociones y sexualidad”, detallaron.
Además del apoyo dentro del albergue, también proporcionan asesoría psicológica, legal y/o laboral, según sea el caso, a mujeres embarazadas que no tienen necesidad de salirse de su entorno inmediato porque poseen un trabajo formal, tienen la posibilidad de seguir con sus estudios y cuentan con el apoyo de su familia o pareja.
Asimismo las colaboradoras de la organización destacaron que a pesar de la promoción de métodos anticonceptivos, continúan presentándose los embarazos no deseados.
“Una cosa que tenemos bien claro en Vifac es que la información sin formación, no sirve, es decir yo puedo poseer muchos datos técnicos y médicos, pero si no tengo una formación psicológica y emocional al nivel de mi edad y circunstancia, será poco probable que pueda hacer uso adecuado de esa información”, dijo Rojo, subrayando que en los últimos cuatro años han incrementado los casos de embarazo infantil y de menores de 15 años en la entidad.
A lo largo de su existencia, la institución ha brindado atención a mujeres de todas las edades, credos y lugares de origen, como Oaxaca, Durango, Guanajuato y Chiapas, además de centroamericanas, quienes son canalizadas por el Instituto Nacional de Migración.
Asimismo, brindan acompañamiento legal a quienes desean dar en adopción a los recién nacidos. Tan sólo el año pasado, Vifac nacional reportó que 98 bebés fueron integrados a familias adoptivas “es decir, sólo dos de cada 10 madres atendidas solicitaron asesoría para hacerlo”, puntualizaron.