¿Qué tiene ahora La Ley que no tenía antes?, preguntaron en rueda de prensa. “Más de panza y menos pelo”, respondió Mauricio Clavería, batería.
A principios de año los chilenos de la banda La Ley colgaron cuatro temas en la plataforma Spotify, previo al lanzamiento oficial de su nuevo material discográfico y ver cómo medirle el agua a los tamales en materia de fans. En un par de semanas ya tenían 16 millones de reproducciones.
Se arrejuntaron en enero pasado y ofrecieron algunos recitales en Chile, para no errarle, no vaya a ser que no vendieran los boletos. El resultado: éxitos totales.
Se fueron a viajar por Sudamérica y despertar los recuerdos de cuando La Ley era la ley. El resultado: éxitos totales. También se presentaron en Viña del Mar en 2014 y en Mar de Plata. Más éxitos totales. La Ley se presenta en México, el país que les dio el éxito y la fama continental.
Los chilenos se reestrenaron en el Plaza de la Condesa, en la Ciudad de México, y presentaron su nuevo material: Adaptación. Días antes del show ya habían vendido el 80% del aforo.
En el 2005 se separaron, cuando festejaban 15 años de carrera, y regresan ahora con nuevo disco.
Un año antes, fallece en un accidente de carretera Andrés Bobe, fundador y un indispensable del grupo. Fue un golpe mortal para La Ley.
Dos premios Grammy y 11 discos no fueron suficientes para mantenerlos unidos.
Se separaron en 2005, así nada más, sin conflictos, según Beto Cuevas, voz. “La vida son decisiones que se toman”, dijo el músico.
Vuelven luego de 10 años, así nada más, sin rencores ni reconciliaciones, según ellos. “Creemos que todavía hay mucha magia en el escenario”, agregó Cuevas.
En esa década cada quien hizo sus cosas: Beto Cuevas se lanzó como solista. Mauricio Clavería se quedó a vivir “en mi México querido” y fue parte de Los Concorde, con Leonardo de Lozanne y otros más. Mientras que Pedro Frugone alterna su carrera entre la música y el modelaje.
Aseguran ser una banda “que todavía tiene mucho que decir”. Porque “la gente sabe que somos La Ley, porque sonamos a La Ley”, cantinfleó Beto Cuevas.
Saben que no es una banda que se adapte fácilmente “No somos tan camaleónicos”.
Dijeron que el nuevo material discográfico “no es una remembranza de los anteriores, ni un recalentado”, sino todo lo contrario.
Que no se sienten como una banda antigua, ni vieja, sino todo lo contrario. “No somos una banda vintage”.
La Ley quiere ser nuevamente la ley, como lo fue hace más de 15 años y vivió sus glorias, aunque ahora ya hay jóvenes que se preguntan intrigados: “¿Qué es La Ley?”.
