Más Información
vidaq@eluniversalqro.com.mx
¿Qué tiene Prince Royce que no tenga Romeo Santos? Casi nada. Romeo canta bachata para muchachas y señoras, mientras que Prince canta para niñas. Esa es la gran diferencia.
Romeo es moreno. Prince es más joven y de piel más clara. Esa es también otra diferencia.
Ambos son del Bronx de Nueva York y se acusan mutuamente de copiarse el estilo, aunque Romeo, en ese terreno, tiene más años en el género y es mejor cantante que Royce.
Prince Royce se llama en realidad Geoffrey Royce Rojas, es un cantante de sangre dominicana y de origen humilde. Su padre era un taxista y su madre, peluquera.
Tiene tres discos (Prince Royce, Phrase II y Soy el mismo) y en México y América Latina tiene la fama que no puede presumir entre los latinos en Estados Unidos.
A los 16 años concursaba en los programas de talentos. A los 18 años cantó en el programa de televisión Sábado Gigante, con don Francisco, temas de Wisin & Yandel, a quienes admira.
Con Wisin, pero sin Yandel, el “Príncipe” de la bachata azucarada cantará hoy, 11 de octubre, en una noche que promete inundar la Plaza de Santa María de hormonas y perfumes no baratos para adolescentes.
Es seguro que ambos cantantes interpretarán “Soy tu libertad”, una canción con letras para niñas de primaria. “Yo sé que tu novio no quiere que estés conmigo y que seamos amigos”. (“Tu libertad”).
Otro tema donde Wisin acompaña a Prince es: “Me marcharé”. Se trata de una mezcla el hip hop de Puerto Rico y la bachata del Bronx.
Prince Royce también presentará las canciones de su más reciente material discográfico, titulado Soy el mismo, que distribuye Sony, y el cual se encuentra en la lista de popularidad en las estaciones de radio. Un álbum que busca los recuerdos infantiles y celebra el haber alcanzado el éxito.
“Soy aquel, el mismo de ayer, el que escribía sus canciones en el tren” (“Soy el mismo”). Es obvio que cuando alguien canta que “ni la fama, ni el dinero me han cambiado”, significa que ya no es el mismo y que ya todo cambió.
¿Cuál es la diferencia entre Prince y Romeo? Nada. Que ambos aprovechan el gusto que las niñas por la bachata, ese ritmo pegajoso, de letras fáciles, y sonidos cachondos, sensualidad fina, sin ser obscena, como el “perreo”. ¿Será por eso que les gusta tanto a las adolescentes? Que lo sepan bailar eso ya es otra cosa.