A parte de reunir la obra de Salvador Alcocer Montes, se debe hacer un estudio biográfico del poeta para entender referentes y símbolos inmersos en sus libros, comentó el también poeta Arturo Santana, quien participó en el homenaje póstumo que rindieron familia, amigos y autoridades culturales en el Teatro Alameda.

“No es fácil entrarle a la poesía de ‘Chava’ si no la ligamos estrechamente con su vida, tenemos también que leer a los poetas norteamericanos como Ezra Pound, porque de ahí procede el fundamento poético de la obra de Chava”, agregó Santana.

El esbozo biográfico del poeta fallecido el 29 de enero, permitirá responder a la pregunta ¿Quién fue Salvador Alcocer?, “porque sólo de ese modo vamos a poder acercarnos a esos referentes y símbolos, a esos vacios constantes que hay en su obra”.

Santana conoció al fallecido poeta a mediados de los años 80, durante unas pláticas literarias que se daban en la Casa de la Marquesa. Alcocer Montes fue de los primeros poetas con los que Santana convivió al llegar a Querétaro.

En el homenaje póstumo, el poeta leyó un poema de Papeles en la mesa (1998), un libro que conserva la dedicatoria de Alcocer le hizo y que él reseñó para la presentación que se realizó en Toluca y Querétaro.

El evento fue organizado por el Instituto de Cultura del Municipio de Querétaro, con presencia de los hijos del poeta, Kyria y Jaime Alcocer, amigos y artistas como Enrique Vallejo, José Luis Álvarez Hidalgo, Mariana Hartasánchez, Julio César Cervantes, Sara María Arana, José Luis de la Vega y José Luis Sierra.

Laura Corvera Galván, directora del Instituto Queretano de la Cultura y las Artes (IQCA), también participó en el homenaje póstumo. Ahí, Corvera Galván comentó que el poeta Salvador Alcocer entregó hasta una semana antes de su fallecimiento, textos sueltos al IQCA, los cuales formarán parte de una próxima publicación que estará al cuidado de dicha institución.

Un vaso de agua, es el último libro que Alcocer Montes escribió en conjunto, la obra también permanece inédita y se espera que se publique con los demás textos que dejó escritos el poeta. Entre los libros publicados del poeta destacan: ¿Qué ciudad es esta? (UNAM, 1978); Faltan tres huevos para el amanecer (Editorial El juego, 1978); Árbol de fuego (Gobierno de Querétaro, 1996); Papeles en la mesa (Editorial Tunastral, 1998); Canario Ciego (UAQ, 1984) y El libro feo (SUPAUAQ 2000).

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