El celuloide, y no el digital, es el mejor formato para restaurar y proteger películas, dijo Albino Álvarez, nuevo subdirector de rescate y restauración de la Filmoteca de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
“En el caso de lo digital, de las socorridas y llamadas nuevas tecnologías, el riesgo es latente, han sucedido muchos casos de desastre en otros países en donde libros y archivos ya no se han podido abrir por las migraciones continuas de las plataformas”, explicó el especialista.
El funcionario universitario explicó que el soporte fílmico, como el poliéster, así como el nitrato y acetato, tiene un rango de vida de 100 años aproximadamente.
La Filmoteca de la UNAM resguarda es sus bóvedas unos 14 mil títulos y unas 400 latas de películas mexicanas y de América Latina. Junto con la Filmoteca de San Paulo, Brasil, son los dos archivos fílmicos más importantes del continente.
“Las películas sufren un proceso de deterioro y el proceso fotoquímico nos sirve para preservar y recuperar esas películas que están en peligro de morir y tenemos chance de resucitarlas, y alargar su tiempo de vida”, agregó Álvarez.
Desde hace más de dos décadas, la Filmoteca se ha dedicado y especializado en el rescate y preservación de materiales fílmicos. “Este es el lugar del país donde se vienen, de todo el mundo, a restaurar y a rescatar materiales”, dijo el especialista.
A partir de 2015, la Filmoteca de la UNAM tendrá su propio laboratorio digital y se convertirá en la única institución que tendrá, a partir de este año, la posibilidad de restaurar películas y preservarlas en dos formatos: en negativo y en su versión digital.
“El proyecto (del laboratorio) empieza con este reforzamiento, de tal manera que las películas que se recuperen y se restauren fotoquímicamente hablando, tendrán mejores condiciones para ser tratadas en el laboratorio digital”, indicó Álvarez.
En México, la Cineteca Nacional, una institución dedicada principalmente a la proyección y promoción del cine, inauguró su propio laboratorio digital.
La Filmoteca de México trabajará en breve en la restauración del cortometraje documental ‘El bolillo fatal’ de Luis del Castillo, película que narra el fusilamiento de Alfredo Jáuregui, hijo menor de una familia acusada del asesinato del ex presidente José Manuel Pando (1848-1971).
‘El bolillo fatal’, película boliviana de 1925, de Luis del Castillo, podría ser el primer proyecto que sea rescatado y respaldado en los dos formatos.
“Para México y de cualquier parte del mundo, prolongar la vida de una obra de arte, en este caso cinematográfica, se facilita el goce para futuras generaciones”, concluyó Albino Álvarez.