Una de las cosas que jamás pensé que pasaría es que la gente pudiera querer una foto con un tipo tan feo como yo”, dice Rick Dale, quien comprobó su estatus de celebridad en México.
Después de una firma de autógrafos que duró más de tres horas y en donde recibió regalos, apretujones y muchos agradecimientos, Dale está sorprendido de que casi 15 mil personas se dieran cita en una plaza comercial del DF para verlo. “Cuando llegamos me impresionó toda la gente que había, comenzamos a caminar por el pasillo y lo más sorprendente fue cuando vi a todas las personas que gritaban mi nombre, no podía quitar mi cara de emoción y estuve a punto de llorar”, confiesa.
El protagonista del programa Los Restauradores, que se transmite por History Channel los miércoles a las 21:00 horas, asegura que estar en México es una de las sorpresas más grandes de su vida. Ya en nuestro país ha tenido la oportunidad de comer cosas típicas y sobre todo de tomar tequila. “Ha habido mucho de eso”, dice entre risas, Dale.
Habitante de Las Vegas y con un taller integrado por su familia, Rick reconoce que entender el impacto que tiene su trabajo y su estilo de vida está más allá de su país. “Yo comencé en este negocio en el patio trasero de mi casa, ahora venir acá y descubrir el impacto que tenemos en la gente es grandioso”, agrega.
Rick Dale tiene un negocio de restauración de objetos antiguos en Las Vegas, con él y más de 30 años trabajando con sus manos y su familia, ha conseguido no sólo sentirse útil, sino tener la oportunidad de llegar a mucha gente. “Kelly siempre dijo que cuando la gente visitará nuestra tienda tenía que salir a saludarlos, porque por ellos tenemos todo lo que tenemos, sin embargo, ahora el trabajo y la filmación del programa hace más complicado eso”, dijo.
A punto de presentar un libro para niños cuyo protagonista es él mismo, Dale reconoce que nada de lo que tiene sería posible sin la ayuda de su esposa. “Ella es el cerebro de los negocios”, expresa. Y está seguro que encontrará en México muchas cosas antiguas para llevarse a casa.