La consigna era una, ganar a como diera lugar, dijeron las personas consultadas por este periódico.
El enemigo, Los Tiburones Rojos del Veracruz. Era un triunfo necesario, luego de dos combates de los Gallos Blancos sin victoria.
En el municipio de Tequisquiapan, un mini-taxi repleto de fanáticos salió rumbo al estadio Corregidora; iba a tope y de sus ventanillas salían cuetones, cánticos y saludos con la V de la victoria.
Ya en las gradas, como siempre, la fiesta total.
En los palcos también había esperanza. Un 2-0, 3-0 y los más entusiastas pedían un marcador de 10-0, eran los pronósticos de los fanáticos VIP para con su equipo.
Y se hizo justicia. Los Gallos Blancos de Querétaro le ganaron a los Tiburones Rojos de Veracruz con un marcador de 2-0, terminando con la mala racha.
El equipo queretano demostró gran entrega y mucho tino en la portería enemiga, a pesar de que jugó con dos hombres menos desde el inicio de la segunda mitad, factor que no influyó en el resultado, venciendo a un tiburón que se ahoga en el fondo de la tabla general.