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De lo figurativo a lo abstracto, así es como hizo la transición en el arte la pintora Rocío Minguet, evolución que la llevó a exponer por primera vez su trabajo en Querétaro, con la inauguración de su obra Recreando.
Rocío, proveniente de la Ciudad de México, inició su interés por convertirse en artista pictórica desde los momentos en que se apoderó de una galería de arte en Polanco, CDMX.
Sus influencias se generan desde el acercamiento profesional al maestro español que la introdujo al mundo del arte, Ramón Ramírez. De igual manera, Herlinda Sánchez Laurel, considerada como una de las grandes pintoras del Colegio San Carlos, fue una importante marca en el camino de Rocío.
Minguet eligió Querétaro, un lugar que desde siempre la influyó en su gusto por la capital, Jurica, sitio que albergará la exposición. “Éste es un lugar emblemático, Jurica, muy representativo y me gusta mucho este concepto, hice un par de obras en agradecimiento en que me dieron el espacio en este bello lugar para exponer la obra, siempre me ha gustado mucho y aquí estará todo un mes”, manifestó la pintora en entrevista para EL UNIVERSAL Querétaro.
Dicha exposición fue un trabajo de dos años, en el que la artista pasó de una corriente figurativa en la que se concentró en desarrollar el concepto que la acercara a la pintura de manera técnica y así fue realizando una transición al abstracto, donde en palabras de Minguet, fue un proceso natural por el que se dejó llevar, pues con cada pincelada se fue transportando a crear obras que la hicieran sentir algo y así poderlo representar en el lienzo.
La técnica que eligió para representar cada obra fue el óleo sobre tela y el acrílico, los cuales, durante el recorrido de la obra, vislumbraron una propuesta de gran textura y colorido.
Minguet tomó un camino decisivo para adentrarse en la pintura, acudió a múltiples talleres de pintura, a ello se suma el gran fanatismo que tiene por el arte con una amplia colección de cuadros, además de la galería que maneja en la CDMX.
En la velada no sólo se reunieron los amantes del arte, sino amigos y familiares se dieron cita a la cálida presentación para ser testigos del naciente talento y gusto que Minguet tiene por el arte pictórico.
La obra está a la venta con un rango de precios que oscila entre los 7 mil y 9 mil 500 pesos y sólo tendrá permanencia en Querétaro hasta el 30 de noviembre.
