El ver reunidas en un sólo escenario a Ilse Salas, Marina de Tavira e Irene Azuela, no es casualidad, ya que a las tres el teatro las seduce y apasiona, a tal grado, que decidieron montar la obra Crímenes del corazón, por puro placer.

Irene Azuela comentó que todo surgió durante una reunión con Marina de Tavira, y platicando se dieron cuenta que nunca habían hecho teatro juntas, en ese instante decidieron realizar Crímenes del corazón, de la escritora Beth Henley.

“Esto es un gusto, suena muy egoísta pero creo que también los proyectos tienen que surgir de un gusto personal”, dijo Azuela.

Algo que respaldo Marina de Tavira, al explicar el porqué se inclinaron por esta historia. “Es un texto que me moría por hacer, que lo tenía ahí, todos los actores lo conocemos, pero fue de pronto decir ¿por qué no lo hacemos profesionalmente?, ¿por qué no la pasamos haciéndolo en las aulas de las escuelas? así la gente tampoco lo va a ver”.

Marina explicó que uno de los objetivos de hacer esta obra, era el de poder trabajar con aquella gente que admira y que sabe le pueden aportar algo a su labor como actriz. De esta forma se integró Ilse Salas, Martín Altomaro, Jana Raluy y Pedro de Tavira, bajo la dirección de Enrique Singer.

“No se está haciendo una obra para vender, sino realmente porque se les pegó la gana hacer una obra para actores, me parece lo más genuino y bonito, lo aplaudo y qué bueno que me invitaron”, declaró Ilse Salas.

Aunque su carrera se ha proyectado mucho más en televisión y cine, acaba de regresar del Festival Internacional de Cine de Berlín, donde se presentó la película Güeros. “Con todo lo padre que es hacer cine, para mí el teatro es mi cosa favorita, porque tienes mucho tiempo para trabajar tus personajes, en el cine es muy rápido y al final lo que queda es lo que se le pegó la gana al director, aquí tú eres el dueño del espacio, eso es un placer como actor”, expresó Salas.

Amor incondicional

Crímenes del corazón, es una obra que aborda la historia trágica de tres hermanas: Lenny, Meg y Babe (interpretadas por Marina, Irene e Ilse) quiénes a su corta edad han pasado un sinfín de pruebas y han sobrevivido gracias al amor fraternal que se tienen.

“Es una obra acerca de la soledad, la frustración, lo que pudimos haber sido y no fuimos, sobre la vida, y cómo esto se refleja en las relaciones humanas”, señaló Marina de Tavira. Como una celebración a la vida, así define Irene Azuela esta obra, porque muestra como los vínculos familiares, con todo lo bueno y malo, es un espacio de salvación para los personajes. “Ha sido increíble como de manera muy natural hemos enganchado y conectado increíblemente”, dijo Azuela.

Crímenes del corazón inicia temporada en el Teatro Helénico, a partir del próximo 28 de febrero.

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