Promocionando su último álbum y formando parte de una de las plataformas de música más innovadoras de nuestros tiempos, la banda mexicana Miró se presentará el día de hoy en la ciudad de Querétaro, la cita es a partir de las 9 de la noche en La Glotonería, sede que tiene como objetivo impulsar el desempeño artístico y la profesionalización de la escena rockera de bandas emergentes o en desarrollo.
En exclusiva para El UNIVERSAL Querétaro, Damián, baterista de Miró, y Arthur White platicaron sobre esta incursión, además de sus nuevos lanzamientos.
—Muy bien, estamos muy contentos porque nos tomaron en cuenta para esta gira en la que participan tantas bandas; creemos que lo más importante es que pudimos incursionar en este movimiento y esperamos que en algún momento podamos encabezar muchos de los carteles de los festivales que se realizan en nuestro país.
Consideramos que este circuito es una excelente plataforma para que la gente se permita conocer más bandas y averigüe qué es lo que está pasando en el mundo de la música, no sólo de México, sino también de otros países.
—Nosotros somos una banda de rock; me refiero en el buen sentido y no a los clichés. En el sonido se reflejan nuestras influencias, que van más allá de un género, son buenas canciones. El último disco de Miró tiene tintes de pop, porque es lo que hacemos, tratamos de componer melodías que nos gusten y recuerden cosas; es una producción con un sello de cada uno de nosotros.
—Hablamos de dolor, de amor y amor puro; hay una canción que yo le compuse a mi hijo, también tenemos temas de conciencia social —no tan explícita, ni tan literal— pero sí enfocados a eso. Hablamos de cómo encontrarnos con nosotros mismos, de las preguntas que nos hacemos todos los días y de luchar por lo que queremos; algunos temas son muy existenciales.
—Creemos que la música tiene el poder de enamorar a cualquier persona en cualquier parte del mundo y en cualquier idioma. Pretendemos llegar a la mayor cantidad de gente posible, la música es universal y nos gusta mucho darnos cuenta que cuando vamos a un show donde no nos conoce la gente, terminan queriendo más de nuestra banda y hasta compran un disco. Esperemos que nuestra música llegue a los millenials, a los hijos de los millenials y a los abuelos también.
—Habrá mucha diversión, sí somos una banda de rock y somos muy intensos, pero también somos una agrupación muy divertida y al final, muy desenfadados.
Hacemos que la gente se la pase chido porque nosotros también queremos pasárnosla increíble. Los que no conocen a Miró creo que se van a llevar una gran sorpresa y van a querer volver a vernos cuando regresemos.