En este regreso a clases, lúcete con tus hijos al cuidar de su alimentación. No es necesario que lo prives de alimentos dulces y sólo le pongas hojas verdes en su lonchera, porque esto ocasionarás que las repudie. La solución está en el balance y el equilibrio de los ingredientes.
El chef Joan Bagur, socio junto con Mari Tere Ramírez Degollado, de Sal y Dulce Artesanos, explica que para que el lunch cumpla con el objetivo de ser una buena colación entre el desayuno y la comida, debe representar hasta un 20 por ciento de las calorías que los niños consumirán a lo largo del día.
"Hay que tener presente que éste no sustituye al desayuno, y que si un niño sobrecarga su estómago a la hora del recreo porque no desayunó, repercutirá en su salud y en su aprendizaje".
Para que el pequeño consuma con gusto su refrigerio a la hora del recreo, comenta el chef, debe cumplir ciertos requisitos, comenzando porque sea de su agrado, de lo contrario no lo comerá. Que sea creativo y variado de esta manera no le aburrirá y práctico para que lo pueda comer con facilidad.