Valiente, tenaz y activa, así es como se define Alejandra Carlota Hernández, escaramuza por tradición familiar y quien recientemente fue coronada como Reina de la Unión de Asociaciones de Charros del Estado de Querétaro.
Desde temprana edad, Alejandra comenzó a interactuar y vivir la pasión por el deporte nacional, pero fue hasta los 12 años que perteneció a un grupo de escaramuzas de su pueblo natal, Cadereyta, donde forjó su increíble capacidad sobre el caballo, hasta poder representar a su municipio y al estado en competencias nacionales y estatales.
A sus 19 años cursa el tercer semestre de la Licenciatura en Derecho en la Universidad Anáhuac y sueña con formar un nuevo equipo de escaramuzas. En entrevista exclusiva para EL UNIVERSAL Querétaro, Alejandra comparte su importante papel como reina, así como su pasión por la charrería y por México.
Este deporte es de tradición, se hereda. Toda mi familia es de charros, mi abuelo, mi mamá, y del lado materno, es donde nace el amor por los caballos y el deporte. Desde pequeña tuve la suerte de estar ligada a esto, pero fue hasta los 12 años que empecé a competir a nivel estatal y nacional.
Es un trabajo, no hay concursos, ni otros pasos para serlo. Es el hecho de tener un buen tiempo dentro de este ámbito y el presidente de la unión hace la invitación, tuvimos un evento en el rancho de mi familia y ahí llegaron a hacerme la invitación, que para mí fue una distinción muy importante y por supuesto, la acepté gustosa.
La más importante es el amor que le tienes a México, siempre escuchamos una queja constante sobre el gobierno y la situación de nuestro país, y cuando me monto en un caballo para representar al deporte nacional, me siento unida con todos. Me siento orgullosa de portar los vestidos, no solo es la identidad de ser charro, sino también es el portar el traje adecuadamente, ya que todo lo que usamos es hecho por manos artesanas.
Cada que tengo la oportunidad de vestirme de Adelita, de China Poblana o de charra, siento una emoción enorme porque sé lo que esto representa, ya que es un trabajo de mucho tiempo y esfuerzo, y qué mejor que demostrarlo con estas vestimentas 100% mexicanas. En cuanto al proceso, portar un atuendo Charro es un poco complicado, ya que requiere de mucha concentración y es que son tantas cosas que es posible que a veces se te olvide algo, es decir, debemos portar desde los zapatos hasta los aretes, collares y sombrero; son pasos que por ningún motivo debemos olvidar.
Es una tarea muy importante y un gran compromiso; Querétaro es un estado con cultura y patrimonio, el nivel de charrería aquí se ha vuelto muy importante y hemos tenido campeonas nacionales de escaramuza y subcampeones nacionales de charros. Representa un gran esfuerzo, pero también un orgullo representar a todos.
Unión, México es un país muy rico, no solo en naturaleza y cultura, sino que también representa la fuerza de todos los mexicanos y cuando decidimos hacer grandes cosas, las logramos. Yo me siento orgullosa de ser mexicana, practicar el deporte nacional que no se llevaa cabo en otro lugar del mundo y así poder aportar mi granito de arena para que podamos ser un mejor país.
Como es mi costumbre, lo pasaré en mi municipio, en compañía de familiares y amigos con una tradicional noche mexicana que solemos hacer cada año en mi familia, es algo que disfrutamos mucho porque es un día muy especial para nosotros. Además, este 16 de septiembre tendré la oportunidad de acudir al desfile militar en la cuidad de Querétaro, es algo que sin duda ¡me emociona mucho!
La alegría en cada persona de celebrar a su país y los colores que percibimos por todas partes, porque creo que reflejan nuestra verdadera identidad como mexicanos; el hecho de ver los colores verde, blanco y rojo es algo que me llena de orgullo y me hace sentir muy afortunada.