Los videojuegos son más que productos para el ocio, los jugadores mexicanos encuentran en el juego diferentes sensaciones, según la investigación “Gamers”, elaborada por la agencia De la Riva Group.
El estudio dice que cada uno de ellos cuenta, en promedio, con 2.2 dispositivos diferentes, y que el hogar es el sitio predilecto para jugar.
Las consolas fijas como PlayStation, Xbox y Wii, son la que tienen mayor penetración, con un 54 por ciento, le siguen los smartphones (48 por ciento), las PCs (45 por ciento), laptops (44 por ciento), consolas portátiles (17 por ciento) y tabletas (14 por ciento).
Sobresale que el 75 por ciento de los jugadores acostumbra comer mientras juega ya que “es parte del ritual”, de hecho, la investigación afirma que es una actividad que sirve para hacer frente al estrés que pudiera generar un título, aunque también se trata de un sistema de recompensas y castigos: el que pierde es el que termina comiendo un poco más, en lo que espera su turno. Sólo 2 de cada 10 acostumbran beber cerveza.
El estudio —que consideró mil casos a nivel nacional, hombres y mujeres de 12 a 40 años de todos los niveles socioeconómicos— divide a los jugadores en: gamers y players.
Los primeros, en su mayoría usuarios de consolas, se caracterizan por ser expertos dedicados en la materia, envolverse más en los juegos y estar interesados en actividades relacionadas a esta industria. Los segundos, que usan más los dispositivos móviles, principalmente teléfonos inteligentes, son más moderados, juegan por momentos; y no tienen un compromiso fijo con un título.
“La aceptación del juego en todas partes ha creado un mundo de jugadores casuales o players”, se enfatiza en la investigación.
Este segmento, al tener la opción de llevar “jueguitos” en su teléfono, tiene más posibilidades de utilizarlos en distintos espacios como el hogar (60 por ciento), el transporte (20 por ciento), el baño (13 por ciento) y la oficina (10 por ciento).
¿Quiénes pasan más tiempo frente a la pantalla?, ¿los gamers o los players? De acuerdo con el informe, los primeros dedican 13 horas a la semana, mientras que los segundos, sorpresivamente, 60 minutos más.
Los jugadores mexicanos, cada mes, gastan alrededor de 160 pesos en videojuegos (para la consola) y 69 pesos para adquirir juegos de dispositivos móviles.
Dentro de los dos grandes grupos que se distinguen en el estudio, se especifican otros subcategorías. Los “players oportunistas” (35 por ciento), en su mayoría hombres, aprovechan cualquier momento libre para jugar, principalmente, desde su teléfono inteligente.
Los “players sociales” (28 por ciento), generalmente mujeres de 18 a 25 años, juegan para crear una atmósfera de convivencia. Los “gamers aplicados” (16 por ciento) buscan títulos, como los de deportes, que les permiten probarse frente a sus amigos.
Los “gamers devotos” (8 por ciento) son aquellos que tienen un amplio conocimiento del tema, cuentan con diversas consolas y asisten a convenciones. Los “players febriles” (7 por ciento) son mujeres de 25 a 40 años que se obsesionan por un título, pero en cualquier momento lo dejan.
Finalmente, los “gamers automatizados” (6 por ciento), son en su mayoría adolescentes acostumbrados a los juegos y que los ven como una forma de interacción “natural”.
(Con información de L.M.P)