Más Información
Han pasado cinco días de la muerte del historiador Guillermo Tovar y de Teresa (23 de agosto, 1956/10 de noviembre, 2013), cronista de la Ciudad de México, y las anécdotas que se cuentan hoy sobre su vida y obra resaltan su pasión por la historia.
Una de esas anécdotas es la amistad del cronista con el historiador queretano Francisco González de Cossío, una amistad que nació cuando Guillermo Tovar y de Teresa tenía 17 años de edad.
El joven Guillermo tomó como guía intelectual al historiador queretano, lo llamaba maestro y su primer libro Noticias históricas de la Delegación Miguel Hidalgo, publicado cuando apenas tenía 19 años, fue dedicado precisamente a Francisco González de Cossío, quien además hizo la nota introductoria de esta primera obra de Tovar y de Teresa.
La historia de esta amistad la tiene muy presente el embajador Francisco González de Cossío, hijo del connotado historiador y colaborador de Musicalia, columna que se publica todos los martes en el periódico EL UNIVERSAL Querétaro.
Amigo de la familia
Memo, como lo llama con afecto el embajador, pasaba de joven varias tardes a la semana visitando la casa de la familia de González de Cossío, cuando vivían en la Ciudad de México.
“El cronista fallecido el domingo, inició su amor por los libros y su amor por la historia con un guía intelectual que era el historiador Francisco González de Cossío, a quien buscó mucho y solicitó mucho su amistad, fue un discípulo de mi papá”, recuerda con orgullo el embajador queretano.
De esas visitas que realizaba a la familia, el joven Guillermo hizo amistad con los hermanos menores del embajador. En sí, había una amistad con toda la familia González de Cossío, aunque pasaba más horas acompañando al historiador, en su magna biblioteca.
“Iba a platicar con él, a ver sus libros. Mi papá tenía una gran biblioteca, con libros muy importantes del siglo XVI, algunos incunables, libros raros, pero iba también a beber de su sabiduría, se juntaba también para aprender de él y esto duró años. Era muy notoria la amistad, a pesar de la diferencia de edad; mis hermanas se acuerdan muy bien de él, varios de mis hermanos menores tenían una relación con él”, cuenta el embajador.
Además de conocer al cronista por la amistad que tenía con su padre, Francisco González de Cossío fue también cercano a Guillermo al compartir con su hermano Rafael Tovar y de Teresa, actual presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), el gusto por la música clásica.
“Yo desarrollé una gran amistad con Rafael porque fue compañero mío del Servicio Exterior Mexicano, como diplomático de carrera trabajamos juntos en la Secretaria de Relaciones Exteriores. A mí me mandaron de embajador a Arabia Saudita y él fue embajador en Roma. El amor por la música clásica es el punto principal de unión entre Rafael y yo y el principal punto de reunión de su hermano Guillermo y mi padre, era la historia”.
Conmoción por la noticia
La notica de la muerte de Guillermo Tovar y de Teresa, ocurrida el pasado domingo 10 de noviembre, fue sentida por toda la familia González de Cossío.
“Me pareció en primer lugar una gran pérdida para el país, una pérdida para la ciudad de México, una pérdida para el mundo de la cultura y de la bibliografía, eso es en el plano nacional y cultural; y en el plano personal una gran tristeza porque era un amigo de la familia, de mi padre, y hermano de un amigo mío. La familia Tovar de Teresa es una familia muy cercana a la familia González de Cossío”, añade el embajador Francisco González de Cossío.
