Es potosina de nacimiento y aunque apenas tiene cinco años de vivir en Querétaro, la empresaria, analista y asesora política, Mónica Cabrero de Juárez, se dice queretana de corazón y disfruta de las tradiciones decembrinas que se viven en el estado.
Acompañada de su esposo Eduardo Juárez, y sus hijos Gerardo Alfonso, piloto automovilístico y ganador de la Beca Gobernadores; José Eduardo y Francine, Mónica celebra la Navidad en su hogar.
En medio de su sala luce un árbol navideño con piezas de ornato que ella misma pintó, pero para el diseño final recibió apoyo de su hija Francine.
En las mesas que rodean la sala se ven diferentes adornos encapsulados en esferas de vidrio. Un nacimiento, también en esfera de vidrio, y un pequeño árbol de Navidad, son muy preciados para Mónica, porque son regalo de sus padres.
Para Mónica, la Navidad es una fecha importante de reflexión, un gran momento de espiritualidad y por supuesto de unión familiar.
Ella misma es la encargada de preparar a detalle la cena que disfrutarán en Noche Buena. El lomo mechado es su especialidad, pero también se sirve cabrito, pavo relleno de almendra y nuez, bacalao y ensalada navideña, un menú hecho para disfrutar en familia.