La Navidad (del latín: nativitas, que significa nacimiento) es una de las festividades más importantes de todas las denominaciones del cristianismo, incluido el catolicismo, junto con la Pascua, o celebración de la pasión y resurrección de Jesucristo. La otra gran celebración es la de Pentecostés (del griego Pentekosté heméra ‘el quincuagésimo día’) que es la fiesta del cincuentavo día después de la Pascua.
La Navidad, que conmemora el nacimiento de Jesucristo en Belén, se celebra el 25 de diciembre en la Iglesia católica, en la Iglesia anglicana y en algunas de las ramas del protestantismo. En otras iglesias ortodoxas, como en la griega y en la rusa, se festeja del 6 al 7 de enero, debido a que no aceptaron la reforma hecha al calendario juliano para pasar al gregoriano.
Países angloparlantes utilizan el término Christmas, cuyo significado es “misa (mass) de Cristo”. En algunas lenguas germánicas, como el alemán, la festividad se denomina Weihnachten, que significa “noche de bendición”. Pero estas festividades celebran lo mismo: el nacimiento de Jesús de Nazaret.
El origen de la festividad
Existen diversas teorías sobre el origen del día de la Navidad. En el siglo III se celebraba el nacimiento de Cristo el 25 de diciembre, aún antes de que los romanos celebraran la fiesta del Sol invencible (Sol Invictus).
Según otras fuentes, el festejo, el 25 de diciembre, se debe a la celebración del nacimiento anual del dios-Sol en el solsticio de invierno, adaptada por la Iglesia católica en el tercer siglo D. C. para permitir la conversión de los pueblos paganos.
Otros autores sostienen que el 25 de diciembre fue adoptado en el siglo IV como día de fiesta cristiano, luego de que el emperador romano Constantino I se convirtiera al cristianismo para crear un festival religioso y convertir a los paganos en cristianos. Es importante apuntar que en la Biblia no está asentada la fecha del nacimiento de Cristo, ni se establece celebración alguna para su conmemoración.
De hecho, durante la Reforma protestante, la celebración del nacimiento de Cristo fue prohibida por algunas iglesias, llamándola "Trampas de los papistas" debido a su relación con el catolicismo y el paganismo.
La Navidad es una celebración de las religiones que creen que Cristo es hijo de Dios. En el Islam, Jesucristo es venerado como uno de los profetas, junto con Muhammad, a quien se le “inspiró” el Corán. En la mayoría de países musulmanes no se celebra y en algunos está prohibida, como Arabia Saudita.
Los budistas, que no creen en la divinidad de Jesucristo pero lo reconocen como profeta, celebran la Navidad por la paz que Jesús trajo a la Tierra, sin embargo lo hacen de una manera más sencilla y sólo lo mencionan en sus rezos y en sus rituales.
Un lama dijo: “la Navidad es para nosotros muy importante, puesto que celebramos la venida a la Tierra de un ser excepcional que trajo una hermosa doctrina de paz”. Los budistas dicen que la suya no es una religión, sino un estilo de vida.
Una celebración actual
La Navidad como la conocemos ahora ha tenido numerosas transformaciones, se han incorporado diversas manifestaciones que difícilmente pueden ser identificadas con el nacimiento de Jesús, en Belén.
El árbol de Navidad, el Santa Claus, la nieve y los trineos son algunas variaciones que han convertido la Navidad en una fiesta familiar, de comida, bebida e intercambio de regalos, con un marcado énfasis comercial.
Hay que recordar también que la nieve, Santa Claus y los trineos hacen suponer que la Navidad se festeja en invierno, sin embargo en la mitad del sur del planeta es verano y celebran la Navidad en un clima cálido.
Los mexicas celebraban durante el invierno el advenimiento de Huitzilopochtli, dios del sol y de la guerra, en el mes Panquetzaliztli, que equivaldría al período del 7 al 26 de diciembre. Los evangelizadores desaparecieron al dios prehispánico y mantuvieron la tradición, con características cristianas.
Millones la celebran
Alrededor de 2 mil 300 millones de cristianos, una tercera parte de la humanidad, celebran la Navidad. Parte del resto, reconocen la fecha como el nacimiento de un ser humano excepcional, pero no la celebran: mil 980 millones de musulmanes, mil 500 millones de budistas, 900 millones de hinduistas y el resto profesan una religión indígena o ninguna en particular.