Gabo se interesó en la música desde hace 10 años, cuando las redes sociales no existían y la oleada emo seguía a bandas happy punk de la escena musical, luego de pensarlo mucho y atesorar algunas rolas, el cantante se decidió y finalmente sacó a la luz temas melancólicos que reflejan su personalidad.
Con su disco Memorias sin recuerdos, Preston propone temas tranquilos y óptimos para escucharse en soledad.
—Alrededor de los 16 años le pedí a mi papá una guitarra para aprender y me encontré a un amigo de la primaria con el que empecé a tocar. Mi primera banda se llamaba Preston; compusimos como cinco canciones y las estuvimos tocando por todos lados; en casas y fiestas.
—Empecé a tocar de oído; me tocó la época en la que todavía no existía el Internet y todo era con revistas tipo cancioneros, además un tío me enseñó algunas canciones y últimamente estudié batería.
—Es chistoso porque el primer cassette que escuché fue uno de Ricardo Arjona y aunque todos lo critican, la verdad yo lo escucho y me transporto. Él tuvo mucho que ver en las composiciones y me gustan bandas de todo tipo, desde música norteña, hasta grupos como Tolidos, Canseco, División Minúscula, PXNDX, Finde, que fueron un boom.
—En diciembre lance un disco como solista y yo compuse todas las canciones; fueron 15 rolas, unas las tenía desde hace 10 años y la otra mitad apenas las hice. Me surgió la idea del disco porque se las enseñé a varios amigos y ellos me lo sugirieron, entonces empecé con el proceso de grabarlas en un pequeño estudio que tengo en mi casa, luego las produje, las mezclé y las edité. Son 14 canciones y una es versión en piano.
—Sí, toco piano, guitarra, bajo y batería; todo lo que viene en el disco yo lo grabé; voces e instrumentos. Y bueno, también tiene arreglos de violín, chelo, mandolina y percusiones, pero todo eso se hizo con el teclado, de manera digital.
—Es pop rock, con una onda más de balada, son temas más tranquilos, no es un disco de fiesta; tiene mensajes con letras muy melancólicas. De hecho surgieron así por el momento que estaba viviendo.
—Es el título de una canción y ésta es la que define todo el concepto del disco. Pasé un momento de depresión y ahí fue cuando empecé a escribir y aunque son rolas muy tristes, realmente tienen mensaje.
—Tenía miedo al qué dirán, a que no le gustara a la gente o a que no pasara nada con mi música.
—También toco en dos bandas (The bang bang music y Blue fire), son de covers y la verdad para mí estar en el escenario es algo que me encanta, podría estar haciéndolo incluso sin que me pagaran. Al principio, obviamente me dan nervios, pero luego podría estar por horas.
—Voy a ser telonero de los Allison este 20 de octubre en Bar El Estribo, en Celaya.
SOBRE EL CANTANTE