Por tres años vivió en Querétaro Jerónimo Palomares, fue en su etapa de estudiante de preparatoria y en aquel tiempo visitaba Galería Libertad, por ser uno de los espacios culturales más importantes de la ciudad, ahora en este mismo sitio presenta El regreso, un proyecto fotográfico muy personal, en donde nos habla de su retorno a Sonora, de la imagen como testigo de la historia, como documento de la nostalgia y la memoria.
El antropólogo, especialista en artes visuales y originario de Sonora, retomó su álbum familiar para registrar el viaje de vuelta a la tierra natal, que realizó su abuelo, su padre y ahora él. El regreso estará abierto al público hasta el 9 de septiembre.
Toda la fotografía evoca un recuerdo, pero esta exposición está basada en tus propios recuerdos, ¿cómo fue la creación del proyecto?
—Es un trabajo a partir del ejercicio de la memoria, en donde se da una relación de generaciones, que tienen que ver con el nieto, el padre y el abuelo, yo soy el nieto, y somos originarios de Navojoa, Sonora, y los tres partimos de ahí porque es una ciudad con pocas posibilidades de crecimiento personal y económico, entonces cada uno ha tenido experiencias distintas a partir del emigrar y al final regresar, porque el ser humano tiene esa necesidad, a cierta edad empieza una crisis de identidad por saber tu origen, porque hay un momento en el que no sabemos quiénes somos, y necesitamos recurrir al pasado para saber eso. Por eso uno tiene necesidad de regresar al lugar de origen, pero cuando volvemos vivimos experiencias distintas, entonces lo que yo hice fue complementar las ideas de mi abuelo, mi padre y yo, en conjunto, y hacer una amalgama de recuerdos para plasmarlos aquí.
La foto con la que inicia la exposición nos habla de una imagen muy antigua, ¿cómo fue tu reencuentro con ese material que habla de tu familia?
—Empecé a hacer una selección a partir del álbum familiar, de todo lo que empecé a ver que me parecía interesante, que me llegaba o me hacía sentir cosas, sobre todo aquellas que no tenían tanta claridad, lo que es muy claro no me llama tanto la atención sino aquello que me produce cierta ambigüedad, eso que no me explico por qué pasó, o qué va a pasar, esas fotos las seleccioné y a partir de ahí también comencé a hacer fotografías inspirándome en esas imágenes, empecé a hacer mi interpretación del álbum familiar. Esa foto del inicio es una reinterpretación y le puse un marco antiguo para darle un sentido antiguo también.
¿Cuándo tomaste conciencia de la importancia del álbum familiar, fue hasta que comienzas a hacer fotografía?
—Sí, hasta que yo tomé la fotografía; luego uno es muy inconsciente, cuando uno ve un álbum familiar siempre estás pensando en recuerdos pero no ves las características de la propia imagen, y conforme va pasando el tiempo, y sobre todo si sabes de foto, empiezas a apreciar todo desde otro punto de vista y también pensar en qué contexto fueron tomadas esas fotografías, quién las tomó y por qué, la fotografía ya involucra un aspecto histórico, ideológico, cultural, desde quién la toma.
¿Este proyecto ya concluyó?
—Sí y no. Es un ciclo que cierra, pero va a seguir con otra cosa, las ideas van cambiando pero la esencia es la misma. Y quiero llevar esta misma la exposición a la Casa del Lago de la UNAM.
¿En qué estás trabajando actualmente?
—Todo mi trabajo está en Navojoa, ahorita estoy trabajando sobre la memoria y la parte familiar autorreferencial, pero después quiero enfocarme en los mayos, un grupo étnico que está geográficamente limitado porque es un pueblo que se ha resistido políticamente y geográficamente ante un mundo globalizado. También me interesa el tema de las industrias mineras que están muy adentro en la parte de Álamos, un pueblo minero que ha retomado actividad y que está afectando la ecología del lugar. Asimismo quiero trabajar con los jóvenes que están metidos en el narco en Navojoa.
Este regreso a Querétaro ¿qué recuerdos te trajo?
—Yo siempre quise exponer en Galería Libertad, cuando era muy chaval yo venía aquí y me parecía de los lugares más importantes para exponer.