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Placeres de la frontera

Placeres de la frontera
20/06/2013 |00:46
Redacción Querétaro
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Hablar de las riquezas de Baja California podría ser sinónimo obligado su importante producción vinícola y sus famosas bodegas, sin embargo, actualmente, este estado ha destacado por la rica gastronomía que ofrece, llamando la atención de los más exigentes paladares y convirtiéndose en la meca culinaria del norte de México. Antes, pensar en Tijuana era imaginar la ajetreada vida nocturna y el camino de paso a San Diego, pero este concepto ha dado un giro, ya que en Avenida Revolución, su principal corredor turístico, se ubican algunos de los restaurantes más exclusivos, por ejemplo, el Caesar’s, lugar donde se inventó la mundialmente famosa ensalada César en los años 30.

“Durante la Ley Seca de Estados Unidos, un grupo de aviadores llegaron a Caesar’s a cenar, pero el restaurante ya no tenía mucha comida, así que el chef improvisó y utilizó los ingredientes que tenía, y es así como surge la ensalada. Cabe señalar que en 2007 se preparó la ensalada César más grande del mundo (3 mil 285 toneladas y 60 metros de longitud)”, menciona Alan Bautista, director general de Cotuco, Tijuana

Al visitar Tijuana no te puedes perder el “street food”, que podrás degustar en la Avenida Revolución, compuesta por diversos tipos de carnes como arrachera, fajitas, tacos de birria o menudo.

REVOLUCIÓN CULINARIA

En los últimos años se ha desarrollado un estilo muy particular de cocina en Tijuana, la llamada fusión Baja Med, que no es otra cosa que la mezcla de la culinaria mediterránea, asiática y mexicana con los ingredientes típicos de Baja California, como son los pescados y mariscos, las codornices, el venado, el borrego y los quesos artesanales, aderezado con especias y aceite de oliva.

Algunos de los chefs que manejan esta fusión son Javier Plascencia, en su restaurante Misión 19; Diego Hernández, en Corazón de Tierra; Benito Molina, en Manzanilla, y Miguel Ángel Guerrero, en El Taller de Baja Med, por mencionar algunos.

ROSARITO, CAPITAL DE LA LANGOSTA

Es imposible mencionar Rosarito y no hacer alusión a la exquisita langosta que ahí se pesca y se cocina con gran dominio, ya sea a la mantequilla, asada, en machaca, pozole, omelette, al mojo de ajo o la clásica langosta al estilo Puerto Nuevo, preparada con frijoles, arroz y servida con enormes tortillas de harina.

“La langosta de Rosarito es dulce, de cuerpo simétrico y carne muy blanda, mientras que la del Caribe es de cabeza grande, cola chica y su carne es un poco dura.

Los restauranteros, para comprar la langosta nos dirigimos con cooperativas y debemos contar con nuestras reservas para la temporada de veda, y así brindar a nuestros comensales el platillo insignia de Rosarito durante todo el año”, asegura Susana Plascencia, propietaria del restaurante La Casa de la Langosta.

Otras de las delicias de Rosarito son las codornices y sus huevos, la carne de venado y los tradicionales tacos de pescado.

PARAÍSO VINÍCOLA

Gracias a su proximidad con el Océano Pacífico, su clima mediterráneo y su suelo arcilloso, Ensenada es el principal productor de vino mexicano, tan sólo en esta región se produce el 90 por ciento del caldo de México.

Cada año, miles de turistas visitan Ensenada para recorrer la ruta del vino, que abarca los Valles de Guadalupe, Ojos Negros, San Vicente, Santo Tomás, Palmas y Redondo. De aquí salen anualmente 12.7 millones de botellas de vino a México y 780 mil hacia más de 30 países.

“El consumo de vino en nuestro país ha incrementado, sin embargo el 70 por ciento del caldo que bebemos es extranjero. Al año, México produce 2 millones y medio de cajas, mientras que en Estados Unidos, una sola vinícola, genera 80 millones, y esto es porque no hay tierra para producir”, afirma Jesús Rivera, enólogo de la bodega Barón Balché.

Si prefieres adentrarte más en el mundo de la vid, a menos de un año de su apertura, El Museo de la Vid y el Vino, en el Valle de Guadalupe, acerca a los amantes de los caldos a este maravilloso mundo, además ofrece el servicio de Vinitour, con el cual se pueden recorrer algunas bodegas.

Sin duda, Baja California ya es una destacada plataforma gastronómica que a pasos agigantados está conquistando con nuevos y espectaculares sabores, por supuesto, maridados con los mejores vinos.