“Norteño Style” es un restaurante fuera de lo convencional, y sus creaciones inspiradas y preparadas con auténticos ingredientes sonorenses, transportan a los comensales al norte del país, a través de deliciosos tacos de cortes de carne, lorenzas y caramelos, que son una variación de las “gorditas”.
Este exquisito proyecto surge hace poco más de un año y medio, cuando Luis Alberto Anton y su esposa Bárbara Tello notaron que en Querétaro existen pocas propuestas fieles a los cortes, sobre todo en tacos.
“En realidad llevamos más de 20 años en la industria gastronómica, pero en otros conceptos. Lamentablemente mi carrera no ha sido en México, sino en Europa, pero es momento de regresar a nuestras raíces, queremos hacer las cosas bien”, expresó Anton, quien abrió las puestas de este paraíso para el paladar junto a su esposa, quien es sonorense de nacimiento.
Para traer el toque único del norte del país, el equipo de “Norteño Style” pide la carne directamente de Sonora, así como las recetas para la preparación de los platillos, que son acompañados con tortillas hechas a mano y ¡recién salidas del comal!
En el menú cuentan con 12 platillos preparados con carne 100% sonorense, además de distintos estilos de tacos, que pueden servirse con rib eye, cabrería, costilla y machaca asada de diezmillo.
“La intención es llevar esto a otro nivel de taquería, hacer un restaurante en un establecimiento más grande, enfocarnos sí en una taquería, pero no tradicional”, detalló el chef especializado en gastronomía internacional.
Pero el éxito de este lugar consiste también en la constante búsqueda por sorprender a sus visitantes, y a lo largo de estos meses han tratado de ampliar el menú con opciones como la hamburguesa de la casa, que aunque aún no está incorporada en la carta, sí se le ofrece a los clientes.
Otra de estas incursiones de sabor es la papa loca, que se cuece al carbón, para luego ser partida a la mitad y bañarse con mantequilla, finalmente se rellena con carne asada y se adereza con la salsa de preferencia.
“La comida de Sonora es simple y muy rica, la carne habla por sí misma, no es necesario meterle productos extra. Aquí por ejemplo sólo le ponemos sal de grano, no va marinada porque el sabor natural es exquisito. Tratamos de resaltar la calidad y promover el producto mexicano, ya que a veces creen que por ser de otros países es mejor”, explicó Luis Alberto.
Sin embago, para satisfacer a los clientes, una de las mayores dificultades por las que ha pasado este negocio ha sido el pedido de los insumos de Sonora, pero han seguido fieles a sus principios y lo han logrado, ya que para ser cocinada, la carne no sufre una segunda congelación, con lo que garantizan calidad, textura y sabor adecuados.
“Mas que nada quiero demostrar lo que tengo, dar de comer a la gente es muy grato, y aunque es una labor pesada, la cocina es muy noble, ya que la satisfacción llega cuando al cliente le gusta y regresa”, concluyó el chef.