Hasta el momento son 64 las bibliotecas públicas establecidas en el estado de Querétaro y tres espacios más están en trámite para formar parte de esta oferta, informó a EL UNIVERSAL Querétaro Martha Favila, coordinadora de la Red Estatal de Bibliotecas Públicas de Querétaro (REBP), quien, además, destacó que en estos sitios los usuarios sí leen y las publicaciones más solicitadas son las de corte literario.
Anualmente, la REBP atiende a 700 mil usuarios que se acercan a estos espacios para consultar algún tipo de material didáctico o de lectura como recreación. El 40% de los acervos se concentra en títulos de literatura y éstos son los más requeridos en las bibliotecas públicas; mientras que los correspondientes a ciencias puras (matemáticas, física, química), además de historia, tienen mucho movimiento entre los estudiantes, afirmó Favila.
“Para mí significan mucho las bibliotecas, porque yo, por experiencia propia, sé que a través de la lectura creces; personalmente creces cuando eres lector. Otra cosa maravillosa de las bibliotecas públicas es que sus acervos más grandes son de literatura, entonces es un paraíso la biblioteca pública, de verdad. Varían mucho los acervos de las bibliotecas públicas, van de mil 500 libros hasta 30 ó 40 mil libros de acervos y de eso, digamos, por lo menos el 40% es literatura, son prácticamente los únicos espacios donde puedes encontrar toda la plantilla de escritores mexicanos”.
Hace un año llegó a 34 bibliotecas del estado la colección de publicaciones ‘México lee’, que incluye literatura clásica contemporánea y reúne títulos como Los juegos del hambre o la saga de Harry Potter. “Son libros que atraen a los jóvenes lectores y se prestan muchísimo a domicilio”, explicó Favila.
HAN VUELTO AL LIBRO
“Los libros estaban olvidados; si no había Internet, no entraban a las bibliotecas, porque los chavos solamente bajaban información de Internet, ahorita que ya se conoce toda la información basura que hay en internet, están volviendo a los libros los usuarios”, añadió la coordinadora de la red.
El 80% de estos espacios públicos cuentan con módulos de servicio digital, mismos que tienen un acervo de 3 mil 500 libros electrónicos; sin embargo, son materiales muy solicitados, porque no se pueden descargar, sólo se puede leer en la pantalla de la biblioteca o imprimirlo. “Yo no me imagino a nadie leyendo El Quijote en una computadora, tampoco me imagino imprimiéndolo, mejor lo compras, ¿no?”, comentó Favila.
Sobre el porcentaje de lectores que hay en México, la coordinadora de la Red Estatal de Bibliotecas Públicas de Querétaro (REBP) destacó que en las bibliotecas públicas los usuarios sí leen.
“Lo que yo sabía, no sé recientemente, pero hace años, quienes hacían esta estadística eran los vendedores de libros, los dueños de librerías y de editoriales, entonces siempre se ha dejado como de soslayo la biblioteca pública. A mí me asombra, y al mismo tiempo me maravilla, que dicen que la gente no lee. Pongo un ejemplo, se abrió una biblioteca en Vizarrón (Cadereyta), es una biblioteca pequeñísima, el primer mes reportaron 500 libros prestados a domicilio. ¿La gente lee o no lee? Por supuesto que lee. En la biblioteca Querétaro 2000 me maravilla ver a los jovencitos devolver los libros de México lee, para llevarse otros tantos a sus casas, la gente sí lee, al menos esa es nuestra experiencia en la biblioteca pública”, manifestó.
Actualmente, un total de 64 bibliotecas que forman parte de la Red Estatal de Bibliotecas Públicas de Querétaro. Asimismo, se planea abrir más espacios, uno para el municipio de Cadereyta, Ezequiel Montes y en Landa de Matamoros tienen contemplada un nuevo sitio en la comunidad de Lagunilla y esperan que entre en trámite otro para la comunidad de El Lobo y uno más para Neblinas.
Todos los servicios que ofrecen los lugares que forman parte de esta red son gratuitos, y con la tarjeta de usuario tienen la posibilidad de préstamo a casa.
Este 23 de abril, Día Mundial del Libro, cada una de las bibliotecas del estado tendrá su propio festejo con una programación especial para el fomento a la lectura, aunque continuamente tienen actividades para invitar a leer a los usuarios, con actividades como la hora del cuento para los niños o círculos de lectura para adultos.