Música en vivo, buen servicio y comida deliciosa es lo que se ofrece en “La María”, una cantina de nueva generación, creada con la idea de alejar a los comensales del estrés diario que se vive en la ciudad.
Hace un par de años, Luis Cabieres y Alejandro Fernández salieron a disfrutar las tabernas de Querétaro. En ese recorrido tuvieron la mala suerte de probar, en la mayoría de los establecimientos, alimentos con poco sazón y vivieron malas experiencias en cuestión de servicio al cliente.
“Nosotros somos originarios de la Ciudad de México, estábamos acostumbrados a que en las cantinas de allá sirven de comer abundante, vimos que aquí hacía falta eso, un lugar en donde te diviertas pero que comas bien”, expresó Luis Cabieres, socio fundador.
Es así como de manera espontánea nació la idea de fundar “La María”. Esta cantina abrió sus puertas el 29 de abril de 2015, en la carretera a Tlacote #182, colonia Santiago. El concepto es basado en la historia mexicana, específicamente en la época de la Revolución, pero mezclado con la tecnología de hoy en día.
Al entrar, el bullicio de la civilización parece desaparecer, como si entraras a una cantina de pueblo de los años 20. Sombreros, lámparas antiguas, mesas y paredes de madera decoran el establecimiento ambientando aún más el lugar.
En cuestión de bebidas, los comensales han adoptado como sus favoritas las micheladas, el tequila y el mezcal, de este último cuentan con una amplia variedad como el de alacrán, gusano rojo y el artesanal de sabores charrito.
Para acompañar las bebidas, poco a poco sirven en tu mesa deliciosos platillos al estilo mexicano, entre pozole, menudo, gorditas, caldo tlalpeño, sopes, tostadas, gringas, etcétera.
“Queremos que sea un lugar en donde (los clientes) puedan estar horas y horas sentados platicando o viendo un partido de futbol, sin la preocupación por el servicio”, expresó Luis Cabieres.
En las tardes, “La María” se transforma en toda una fiesta, pues en ocasiones cuentan con música en vivo al presentarse la intérprete queretana Karla Sayeli, quien hace que los asistentes canten a todo pulmón piezas de pop o baladas.
“Aquí es diversión garantizada, haya una o 100 mesas llenas es una gran celebración, te pones a cantar, bailar y disfrutar el momento”, comentó Alejandro Fernández, gerente de “La María”.
