En pleno rodaje de La Bella y la Bestia, la actriz británica Emma Watson tuvo que salir a desmentir los rumores de un supuesto intento de secuestro. “La historia no tiene fundamento y es falsa”, señaló a través de su representante, negando así la noticia que circulaba en varios medios ingleses.
Todo comenzó cuando el diario The Sun reportó que un taxista había escuchado una conversación entre dos hombres en el que planeaban el secuestro de la estrella de Hollywood.
El chofer habría alertado a la policía, que supuestamente dio aviso a la producción del filme.
Tras ser notificados, los responsables de Shepperton Studios, que se encuentra cerca de Londres, reforzaron la seguridad en el set de grabación y contrataron a más guardias para que estén cuidando el tráiler de Watson.
Aunque todo fue una farsa, no es el primer susto que Emma se lleva a lo largo de su carrera.
En 2014 tuvo que alterarse el plan de rodaje de la cinta Noah por culpa de un fan obsesionado que irrumpió en el set de grabación y en 2011 se le asignó un equipo de guardaespaldas después de que recibiera cartas intimidatorias de un seguidor mientras estudiaba en EU.
