El Centro Histórico de la ciudad resguarda un bar con mucho estilo: tenues luces, madera y una gran barra que deja a la vista los más sofisticados destilados son parte de Dodo Café, donde la mixología llegó para cambiar la manera en que vemos los drinks.
“Dodo Café nació con la finalidad de crear un bar diferente, cómodo, en el que puedas tener y disfrutar una plática amena, somos, al igual que el dodo, el ave extinta, un bar extinto, es por eso que se trajo este tipo de bar a Querétaro”, expresó Ricardo Santillán, bartender del sitio.
En este lugar vives una experiencia agradable para el gusto, la vista y el resto de los sentidos, pues cada rincón tiene una explicación. En algún punto de tu estadía, no dudarás voltear al techo, en el que se encuentra dibujado un mapa que hace referencia a un explorador, a las personas que se atreven, y eso es lo que busca este sitio.
Aquí lo que más destaca es la carta, que se cambia cada seis meses, en ella podemos observar una selección de cocteles, que con el simple hecho de verlos, ya quieres probarlos; en esta se encuentran 12 nuevas bebidas y los clásicos imperdibles, que han sido aceptados por sus clientes a lo largo de este año y medio de servicio.
“La primera carta que tuvimos fue para introducir a la gente al mundo de la coctelería, la segunda ya fue un poco más compleja y esta tercera expedición, está dirigida a personas que se quieren aventurar a esta nueva coctelería, a un nuevo mundo, un nuevo sabor, nuevos aromas”.
Un punto más a favor de este sitio es que puedes crear tu propio coctel, con sólo decirle al bartender los ingredientes que te gustan, y así originan algo a tu agrado.
Dodo Café es un sitio pequeño, por lo que el servicio es aún más cálido y personalizado, cada uno de los integrantes de esta empresa es capacitado para brindar la mejor atención, así los clientes siempre desean regresar.
“Hay cierta calidez en el ambiente que podemos transmitir a los clientes y es porque a todos los que trabajamos aquí nos apasiona, es algo único que no en cualquier lugar lo puedes encontrar. Somos capacitados para esto, no todos los clientes son iguales y esto lo debemos de saber”, dijo Ricardo, mientras realizaba un shaking.
El nombre hace referencia a dos temas completamente distintos pero muy significativos para el concepto del lugar: dodo es una especie extinta de ave que proviene de la Isla Mauricio en Madagascar, y el café proviene de aquella época en la que en Estados Unidos se prohibió el alcohol, y sólo en los cafés se podía consumir este tipo de bebidas.
Si quieres probar sus exóticos tragos, no dudes en acudir a este sitio exclusivo, que cuenta con la supervisión del gerente Fernando Hernández, quien se encarga de que llegue hasta tu mesa la mejor calidad y sabor en tus bebidas.
“Experiencia, servicio y calidez, son las palabras que envuelven a Dodo Café, donde lo más importante es que nuestros clientes se encuentren sumergidos en nuevo mundo de la coctelería y que se sientan tratados como lo mejor”, detalló Fernando Hernández.