Para celebrar su 60 aniversario, el dramaturgo y director escénico, Josué Quino presentó un adelanto de su nuevo proyecto Quinqué, un tríptico de desamor basado en tres cuentos de los escritores Juan Rulfo, Gabriel García Márquez y Héctor Lastra, que será llevado a escena por la compañía Los hijos de Vero, el próximo 6 de septiembre, a las 20:30 horas en Sótano Teatro.

“Cumplir 60 es algo extraño”, dijo Quino momentos antes de dar inicio a la función, frente a un nutrido público conformado por actores, directores de teatro y representantes de la Federación de Colegios y Asociaciones de Profesionales del Estado de Querétaro, así como del Instituto Municipal para Prevenir y Eliminar la Discriminación, quienes escucharon atentos desde sus lugares, en el foro del centro comunitario “Josué Quino”.

“Son seis décadas, 12 lustros, pero es el chance que tengo después de tantas facturas, para que esta noche pueda atreverme a hacer algo que siempre me dijeron que no hiciera: vestir cuadros y rayas”, bromeó e hizo un breve recuento a través de su trayectoria artística, para explicar la razón del evento.

“Vamos a realizar algo que comencé hace tiempo. La primera vez que me paré en un escenario fue en el Puerto Veracruz, tenía 11 años (…) Desde que lo probé, no me he podido despegar. Por esta misma razón estamos a punto de estrenar una obra que se llama Quinqué, que es un tríptico de desamor para la que necesitamos invertir en producción y cosas terriblemente caras. Por ello, a Benjamín se le ocurrió hacer esta reunión de amigos y una preventa de lo que vamos a ver próximamente”, compartió el dramaturgo.

Se trata de la adaptación de los cuentos “Macario”, de Rulfo; “Ojos de perro azul”, de García Márquez, y “Breico”, del argentino Héctor Lastra, cuyo engarce ha sido realizado a través del concepto “desamor”.

“Cuando decidí hacer este tríptico me di cuenta que los tres cuentos que había elegido estaban tejidos por el hilo del desamor”, platicó y confesó que en realidad no fueron concebidas para ser escenificadas; “son obras de teatro travestidas de cuento”.

En el acto, Quino presentó a su nueva compañía Los hijos de Vero, conformada por Kika Huerta, Mauricio López, Jorge Sánchez y Sergio Medina, egresados de la Escuela Multidisciplinaria Profesional de Actuación (EMPA), quienes esa misma velada celebraron su estreno como corporación teatral.

Rodeado además de público, por la comunidad teatral, el dramaturgo reconoció a Querétaro como “el Broadway” del teatro, ya que no sólo es un paraíso para este arte, sino que cuenta con destacados impulsores.

“Recuerdo que un día fuimos a ver una obra de un amigo, y a la salida había una mujer pequeñita, robusta, de cabello chino largo, con una sonrisa de oreja a oreja, que agradecía a todas las personas que habíamos asistido esa noche. Se me hizo tan dulce, amable y fortificante esa acción, que se me quedó grabada en la mente y el corazón. Cinco años más tarde, nos reencontramos en otro espacio de teatreros y resultó que ella era la dueña del foro El Sótano, e impulsora de la EMPA; espacio que está plagado de actrices y actores muy preparados y formados desde otra visión”, dijo sobre Verónica Carranco, actriz y directora de la EMPA y El Sótano Teatro.

Luego de agradecer la asistencia del público, Josué dio pasó a la tan anunciada obra, sin embargo, inesperadamente fue interrumpida en el segundo acto, lo que causó una expresión de decepción por parte de los asistentes, quienes absortos en la trama, se quedaron “picados”.

Entre risas, los espectadores felicitaron al cumpleañero y a los profesionales, a quienes congratularon por su desempeño actoral, y extendieron algunos consejos técnicos para su próximo debut.

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