A parte de Guadalupe Reyes, ganador del Premio Nacional de Ciencias y Artes, no hay en Querétaro otro poeta arribeño con una historia musical tan sólida y en las nuevas generaciones no han surgido más compositores del son, lo que pone en riesgo la continuidad de esta tradición.
La estructura poética del huapango arribeño se basa en versos decimales y tiene su origen en los trovadores (juglares) medievales; las rimas avanzan conforme a la astucia del trovador y el conocimiento que tiene sobre temas actuales, políticos y sociales.
Esta problemática, la expone Héctor Delgado Flores a través del documental Juglares campesinos: entre la vida, la fiesta y la muerte. El proyecto, que está en plena etapa de producción, es avalado por Guadalupe Reyes, poeta originario de El Refugio, comunidad de Arroyo Seco, Querétaro, que fue reconocido en 2006 con el Premio Nacional de Ciencias y Artes, en la categoría Artes y Tradiciones Populares.
Guadalupe, junto con sus hijos, formó el cuarteto Los Reyes del Refugio, pero sus hijos son intérpretes más no compositores de arribeño, dice Delgado Flores.
“Don Lupe es el último poeta de toda esa zona arribeña, no hay otro en esa zona que componga y creo que esto es muy alarmante porque falleciendo, él ya tiene 81 años aproximadamente, no hay un sucesor y creo que es importante que este documental que estamos filmando se pueda llevar a las primarias, a los rincones del arribeño, para poder difundirlo, darle a conocer a la gente de El Refugio que no hay otra persona y que está la vacante para ellos”.
En 60 % de la producción realizada del documental, se ha entrevistado a varios exponentes del son arribeño, y con el apoyo económico que recibió del proyecto del Programa de Apoyo a las Culturas Municipales y Comunitarias 2012, que otorga el Instituto Queretano de la Cultura y las Artes, a través de la Unidad Regional de Culturas Populares, se filmarán presentaciones de los huapangueros, en fiestas y en funerales.
“Nos vamos a lanzar a hacer un recorrido musical con don Lupe Reyes, tenemos pensado ir a topadas, enfrentamientos en los que se los trovadores demuestran sus habilidades poéticas y de improvisación, porque es muy característico del arribeño, entrevistaremos a más músicos, además, de ir a las celebraciones. El arribeño lo que tiene es que es comunitario, si hay quince años van y tocan, si hay cumpleaños, un nacimiento, cuando hay un fallecido también van; nuestra idea también es llegar y capturar ese tipo de imágenes, porque les hacen sus velaciones y sus cantos a lo divino”, señaló.
El huapango arribeño se toca en la zona media de San Luis Potosí, el noroeste de Guanajuato y el norte de Querétaro, y el huasteco abarca los seis estados que forman parte de dicha zona: Querétaro, Tamaulipas, San Luis Potosí, Veracruz, Hidalgo y Puebla.
El estreno de Juglares campesinos: entre la vida, la fiesta y la muerte, está previsto para septiembre de 2013. La guionista del documental es Carmen Camarena, en fotografía participa Gilberto Pérez Baeza, de Morelia, Michoacán, y el sonidista es Alonso Luna de Celaya, Guanajuato.
Héctor Delgado Flores, director del filme, es originario de Celaya, Guanajuato, estudió la carrera de filosofía en Michoacán y al titularse decidió hacer cine. Tiene dos años viviendo en Querétaro y fue en los talleres de Tinta Creativa, que dirige la guionista Lucía Beltrán, en donde delineó este documental.
