Con más de 25 años en escena, "Chon y Chona rumbo al portal" se ha convertido en un montaje navideño de gran tradición para Querétaro. Lupita Smythe es la creadora de esta pastorela que originalmente fue escrita en verso y titulada Carruaje, pero que al incluir a su personaje Chona y su marido Chon, dos pastores que llegaron desde Chiapas con la idea de convertirse en artistas, la historia cambió, y los Chones se ganaron al público.
Son 11 actores en escena los que cuentan, bajo la dirección de Guillermo Smythe, la clásica historia de los pastores que van a Belén a adorar al Niño Dios, pero en su camino son interceptados por unas diablillas. A lo clásico de la pastorela también le suman comedia, tintes políticos y temas de actualidad.
Chon y Chona rumbo al portal se presenta en el Centro Cultural La Gaviota Teatro, todos los días, excepto 31 de diciembre, y 1 de enero. La temporada seguirá hasta 4 de enero.
En entrevista con EL UNIVERSAL, la familia Smythe y parte del elenco cuentan la historia de la divertida pastorela.
—Jorge Smythe: Brenda (Jennifer) y yo llevamos gran parte del hilo conductor de la obra. Llegamos a esta pastorela haciendo un casting que pensamos era de William Shakespeare, pero al final nos quedamos en ella porque es diciembre en Querétaro y lo que hay son pastorelas. La historia se basa en el anuncio del nacimiento del Niño Jesús y cómo en nuestro camino a Belén, somos incitados por la Diabla Mayor y sus diablillas a no llegar, y harán de todo para impedir que adoremos al Niño Dios.
—Lupita Smythe: Empezamos en 1988, es una pastorela clásica muy bonita que me dieron unas monjas, hecha en verso, y le agregamos a los Chones, que llegaban a la pastorela porque querían ser artistas, al final la historia que me inventé ganó más público, ya no es esa pastorela original que se llamaba Carruaje.
—Guillermo Smythe: Esta pastorela tan querida por nosotros, ya tiene una tradición de más de 25 años, siempre con las modificaciones adecuadas al momento, a la política y a temas de hoy. Estoy muy contento, porque es una puesta escena muy bien hecha, aunque siempre yo la he dirigido, en esta ocasión tenemos la colaboración de Jorge Smythe y Cointa Galindo.
—Jorge Smythe: La estructura es muy ortodoxa, respetamos los cánones de la pastorela, en nuestro caso creo que está enriquecida por un elenco muy grande, somos 11 actores en escena, hay bailes, huapango, cuatro cantantes que interpretan un villancico al final, tiene momentos de teatros cabaret de ficción, dentro de la ficción, donde aprovechamos para poner en la mesa las situaciones que están pasando en nuestro país, desde algún tinte político. Los pastores son muy contrastantes, hay textos machistas y feministas, y se exponen ambas posturas en el escenario que son aleccionadoras, porque dejan un mensaje.
Lupita Smythe (Chona): “Este personaje nació hace como 35 años, en un principio yo era la Chona y tenía a mi Chon y veníamos desde Chiapas, queríamos ser ‘artistos’, así empezó, luego tuve hijos pero a todos los mandaba a Estados Unidos, se casaban y yo me hacía cargo de todos los nietos, todavía el año pasado sacamos a todos los nietos, pero este año, soy mujer liberada”.
“Mi personaje es de los más representativos de las pastorelas. Lo disfruto mucho porque es el contrapeso, ya llevo haciendo un rato este personaje y siempre trato de probar y hacer nuevas cosas”.
“Nosotros somos los pastores que buscamos el momento que nos lleve al estrellato, y buscamos trabajo en un teatro en el que pensamos que se haría una obra de Shakespeare, pero terminamos haciendo a dos pastores”.
“Es una mujer ruda, es una pastora que busca la parte del feminismo e igualdad, siempre está atrás de Bato”.
“Es un personaje machista, pero se esconde dentro de eso un poco de feminismo, su mujer se da cuenta pero trata de esconderlo con el público”.