Es la época del sitio de Querétaro y un grupo de actores ensaya una obra escrita especialmente para dar alientos al derrocado imperio de Maximiliano de Habsburgo, y mientras las actrices discuten quién dará vida en escena a la emperatriz Carlota, y a cuál actor le queda mejor la peluca rubia para interpretar al emperador, los soldados del imperio desmontan el techo de plomo del Teatro Iturbide para hacer balas.
No es una época buena para el teatro, y a la fecha no ha cambiado mucho, revelan los personajes de En mexicano se dice chaquetear, obra que había permanecido años sin llegar a escena y que ahora se presenta en el Museo de la Ciudad, con la dirección de Uriel Bravo y la producción de Investigación y Producción Escénica Manjar y la agrupación teatral Los Desesperados.
El dramaturgo Jaime Chabaud Magnus es el autor En mexicano se dice chaquetear, obra creada especialmente para Querétaro.
En los años 80´s, mientras Chabaud se encontraba en Querétaro estudiando la historia del teatro en la entidad y rescatando el trabajo de creadores como Luciano Frías y Soto y José María Rivera, surgió éste drama.
“Lo que tenía que decir sobre la obra, ya está dicho en escena: Qué poco cambia el mundo, qué poco cambiamos los teatreros, porque también me he especializado en la historia del teatro mexicano, no sólo del queretano, entonces de verdad: qué poco cambiamos los teatreros”, explicó Chabaud.
En mexicano se dice chaquetear se presentó por primera vez en julio en la Feria de Jalpan, Sierra Gorda, y el pasado 20 de agosto se ofreció una función especial con la presencia del autor Jaime Chabaud y Laura Corvera, directora del Instituto Queretano de la Cultura y las Artes, y hoy tendrán una función más, a las 20:30 horas en el foro de usos múltiples del Museo de la Cuidad, en el marco del séptimo aniversario de Avatares Compañía Teatral.
ADIÓS MAMÁ CARLOTA. Aún con el estruendo de los soldados del imperio desmontando el techo de plomo del Teatro Iturbide para hacer balas, se escuchan los cánticos a la emperatriz que se ha ido y se rumora que lejos de Maximiliano ha enloquecido: “En lo hondo de su pecho ya sienten su derrota. Adiós, mamá, Carlota, adiós mi tierno amor”.
A Jorge Luis Cuevas, autor teatral y primer actor, le han encargado una obra que ensalce a la realeza, un drama en donde sus actores están obligados a representar heroicamente a los emperadores.
Edgar Wuotto interpreta a Cuevas. En escena también participan Luzma Espinoza, Daniela Pérez, Marianne Atilano, Ángel Valenzuela y Ernesto Galán, quienes interpretan a los actores de esta compañía que padece la crueldad del conflicto político, la crueldad del teatro, la crueldad de la vida.
Filemon Frías y Soto, político queretano, es otro de los personajes, un ser casi fantasmal que se presenta para dar “ánimos” al dramaturgo, porque tiene que estar a tiempo el drama para sus majestades, aunque tal vez nunca se llegue a estrenar.
