¿De qué hablamos cuando nos referimos a siluetas en el mundo de la moda? No necesariamente de los estilizados, curvilíneos o andróginos cuerpos de las modelos, sino de los contornos que definen la vestimenta.
Cada temporada tiene alguna silueta prototípica, como la que impuso la firma Balmain en el otoño de 2010: la línea ‘T’, nombrada así por el uso de grandes hombreras en sacos y chaquetas, a juego con pantalones pitillo.
El efecto visual de unas hombreras contundentes, y el resto de las prendas ceñidas al cuerpo, creaba, en efecto, una silueta que evocaba a la letra ‘T’.
La sorpresa para esta temporada es que no imperan una o dos siluetas, sino cinco. De hecho, los diseñadores pusieron especial cuidado en el manejo volumétrico de sus propuestas, generando diversas líneas que se adaptan a diferentes tipos de cuerpos, ocasiones e incluso estados anímicos.
