Innovadoras propuestas de maquillaje, joyería, café orgánico, bolsas artesanales, dulces y sazonadores, entre otros productos, se presentaron en la Feria de comercialización, de la Universidad Uco Mondragón.
Luego de una conferencia en la que los alumnos recibieron consejos sobre cómo emprender con éxito, los estudiantes pasaron a una de las áreas generales de la institución para montar los stands con ideas y propuestas que presentaban opciones para todo tipo de público.
“La feria está enfocada a productos nacionales y en este semestre el objetivo no es tanto la innovación, sino contactar a un productor y que los estudiantes sean capaces de desarrollar un canal de distribución. Está más dirigida a expandir el mercado (…) y desarrollar ciertas estrategias de producción”, detalló Adrián Calcáneo, director de la Facultad de Negocios.
Jimena Mardonez, Andrea Cebada e Ivana Jiménez
Más de una decena de stands esperaban a compañeros curiosos que se acercaban para ser atrapados por alguna de las ofertas de la tarde, que no sólo están ligadas a los estudiantes, sino a una empresa o persona real.
“Los productores son tanto de Querétaro como de estados aledaños y la idea es que vayan practicando el análisis de un modelo de negocio para saber de qué manera ayudarlo o asesorarlo para que pueda expandirse”, explicó Calcáneo.
Uno de los stands más visitados fue el de café orgánico que ofrecía muestras y un aroma que atraía a los amantes de esta bebida.
Pamela Gutiérrez e Isamar Uribe crearon Palml
“Es café artesanal, orgánico y es 100% natural. Se llama Café 1200 y proviene de la sierra de Puebla; contamos con diferentes tipos de tueste, de acuerdo al gusto del comensal, que puede ser más o menos amargo”, detalló Tamara García, quien agregó que su propuesta de comercialización es dirigida a cafeterías locales y artesanales.
Otra de las propuestas más interesantes, por su origen, fue la de la marca Palmi, que ofrece bolsas artesanales tejidas en diversos colores, modelos y tamaños.
“Comercializamos bolsas hechas por los presos de Jojutla, Morelos; ellos las elaboran y la ayuda llega directamente a sus familiares, además estos accesorios son sustentables, ya que la materia prima es pet reciclado”, dijo Isamar Uribe, quien detalló que también crearon la marca y generan ideas de diseño y combinaciones de colores.
Brian López, Jesús Núñez, Marco Reséndiz y Nestor Arvisu
Por su parte, Amarantum proviene de la comunidad de Huixcazdhá, Hidalgo. “Esta empresa es la principal fuente de sustento para la comunidad de Huixcazdhá, de hecho, todas las personas del pueblo trabajan ahí y nos gustó mucho porque cuentan con productos incluso para personas con diabetes, y todos contienen lisina para que se pueda absorber de mejor manera en el cuerpo”, explicó Luis Gerardo Soto.
Entre las marcas de golosinas se encontraba Dulce Delirio, que comercializa producto 100% queretano, así como Abrazo mexicano, que ofrece el sabor de la cultura mexicana a través de dulces de leche y cocadas, que son elaborados por doña Lolo, quien actualmente tiene 92 años y vive en Temascalcingo, Estado de México. “Nosotros revolucionamos el concepto y el marketing” dijo Vania Méndez, quien ofrecía muestras gratuitas de su producto.
"El pollo" de la marca "El Gallín" con Adrian Calcáneo
Stands decorados con sábanas, artilugios ad hoc a su producto, pantallas con videos que reforzaban sus ideas, además de curiosidades como un pollo frente al stand de sazonadores, fueron algunos de los elementos empleados por los estudiantes para ilustrar las marcas que ostentaban.
Asimismo se ofrecieron delicias para acompañar una salsa, o bien cortesías para llamar la atención los curiosos, y así explicar a detalle sus propuestas.
