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Música, talento, baile y diversión fue lo que se vivió dentro de las instalaciones de Querétaro Centro de Congresos durante el concierto de la banda de rock Café Tacvba, compuesta por Rubén (vocalista), Meme (teclado, segunda voz), Joselo (guitarra) y Quique (bajo y contrabajo). La banda originaria del estado de México se presentó sobre un escenario de 360º en donde los tacuvos desbordaron energía y complacieron a los presentes durante más de dos horas que duró el concierto.
Las luces se apagaron y se escucharon los gritos de los fans, algunos portaban máscaras de zopilotes, otros más, playeras con el nombre del grupo, pero sin duda todos esperaban ver a su banda favorita.
El momento esperado llegó y en medio de una cortina de humo aparecieron los integrantes que fueron recibidos con palmas y chiflidos, la primera canción de la noche fue “Pájaros”, tema de su más reciente producción El objeto antes llamado disco.
“Esta noche es muy especial para nosotros ya que todos estamos mirando hacia el centro, compartiendo el espíritu de la música y la energía. Tomen fuerzas para cambiar las cosas que no les gusten y vamos a disfrutar. ¡Que Viva QueretaRock!”, expresó el vocalista.
El lugar se iluminó en tonos azules y un gran árbol de aire surgió al centro del escenario para dar paso a canciones como “El ave”, “Tejado del mar”, “Seguir siendo” y “Trópico de cáncer”, esta última forma parte del segundo álbum de la banda Re, lanzado en el año 1994.
Tras un par de minutos, ya sin el sonido de la música, regresó Rubén sosteniendo un globo en forma de corazón humano, mientras iniciaba las primeras notas del tema “Del otro lado del camino”.
Al terminar, en un extremo del escenario se colocó Emmanuel del Real, Meme, interpretó el tema “Amores perros”, soundtrack de la película mexicana que lleva el mismo nombre.
El Zopilote de alas blancas y cabeza negra, como se hace llamar en este disco Albarrán, vistió un poncho con plumas y un gorro de zopilote para continuar con la fiesta, en donde el público no dejó de corear sus canciones, bailar, brincar y disfrutar de temas como “Zopilotes”, “Pez y verde”, “Agua” y “Espuma”.
“Muchas gracias, es un placer compartir la música con ustedes ya que su presencia nos llena de energía”, dijo en el micrófono a sus fans, Rubén Albarrán.
La banda se despidió y el público no dejó de pedir otra canción a base de chiflidos y coreando algunos de sus temas, que derivó a que la banda mexicana pisara nuevamente el escenario para interpretar algunos de los éxitos que los llevaran a la fama, tales como “Eres”, “Amor divino” y “Las flores”.
La noche culminó con “El baile y el salón”, tema que interpretaran todos los presentes mientras globos en tonos azules y blancos rebotaban entre el público, creando un ambiente único que convirtió el concierto en una experiencia inolvidable.