En México existen variantes que forman parte de la tropicalización de este platillo, por ejemplo, la Mexicana, que incluye los ingredientes básicos y chile jalapeño, carne molida, frijoles enteros o refritos, chorizo, aguacate y cebolla, o la Hawaiana (que se prepara en este país y en EU) con jamón y piña.
“En el estado de Yucatán, se cocina una combinación de pizza con el tradicional panucho, la llaman Pizzanucho. Éste incluye jitomate en rodajas y carne especial de aquella zona. En León, Guanajuato, es común acompañar la pizza con un chimichurri hecho con ajo, vinagre, chiles de árbol y perejil”, asegura Serrano.
En el Distrito Federal, destacan los restaurantes que se apegan a la tradición napolitana, pues las preparan delgadas y en horno de leña e incluso, en algunos, utilizan ingredientes importados de Italia.
“La pizza delgada y cocida en horno de leña es la auténtica italiana, aquí las horneamos a 450°C, alrededor de 5 minutos porque se cuecen muy rápido”, expresa Girón.
Finalmente, la pizza es considerada un alimento nutritivo y equilibrado debido a la cantidad y variedad de ingredientes que se pueden utilizar. Los expertos coinciden en que es mejor que sea delgada y se hornee, pues así se conservan los nutrientes de cada ingrediente y el sabor es delicioso.