En días pasados, el cantautor brasileño Roberto Carlos se presentó en el Auditorio Josefa Ortiz de Domínguez de esta ciudad capital, brindando un emotivo concierto a sus seguidores que asistieron a escuchar a su ídolo de varias décadas.
Al cuarto para las nueve de la noche las luces se apagaron y la orquesta comenzó a tocar un popurrí, acompañado sólo por el coro de tres voces; todos vestidos de negro para dar paso a la entrada de la estrella carioca que apareció vestido de blanco y camisa azul turquesa.
“Buenas noches, qué placer, qué gusto de verlos acá en Querétaro. Gracias por haber venido, por todo el cariño... A veces no puedo preguntar todo lo que quisiera como: ¿Qué será de ti?” Y con esta conocida pregunta inició una cascada de éxitos que la gente coreaba emocionada.
Con guitarra en mano y cantando la mitad en portugués, Roberto Carlos interpretó “Detalles”. Posteriormente, acompañado por su director musical al piano, cantó “Desahogo”.
En seguida, el músico brasileño mencionó que hay una canción que había hecho hace tiempo con mucha alegría y que siempre la canta con mucho amor: “Lady Laura”, dedicada a su madre, que también sonó en el recinto.
“Mujer pequeña” se escuchó en guitarra con sabor tropical. Entonces, llegó el momento en que el cantante regaló a su público más que canciones de amor y temas que hablan de “sexo”: “Yo te propongo” y “Cóncavo y convexo”.
Al inicio de su carrera, Roberto Carlos tuvo un éxito muy conocido y esta vez en el Auditorio Josefa, lo hacía sonar una orquesta formada por guitarras, bajos, trompetas, batería, piano, teclado y un coro con voces masculinas y femeninas, mientras él salía del foro para volver a entrar con: “Llevé mi Cadillac al mecánico un día...”.
Después bromeó con el público diciendo que él nunca entendió lo que decía una canción donde había un gato azul y menos en el cielo. Varias lágrimas y suspiros se asomaron con el tema “Un gato en la oscuridad”.
De su nuevo material discográfico sólo cantó su primer sencillo, para dar paso a “La Distancia”, “El día que me quieras”, “Si el amor se va”, “Amigo” y concluir con “Jesucristo”. El público queretano aplaudió de pie. Varios asistentes se acercaron al escenario, el cantante repartió rosas y salió de escena. Piden “otra, otra” y él canta tres temas más: “Amada amante”, “Un millón de amigos” y “Solamente una vez”.
Una noche para recordar, en la que los fanáticos de Roberto Carlos vivieron momentos emotivos en espera de su regreso.
