El guitarrista, cantante, compositor, arreglista y productor mexicano, de origen argentino y exintegrante de la banda Caifanes, Alejandro Marcovich, iluminó Querétaro con su luz cósmica.
La presentación se dio en un conocido bar del sur de la ciudad, en donde la banda Omnia rindió tributo a una de las agrupaciones más icónicas del rock mexicano: Caifanes.
Gabo, vocalista de Omnia y líder de la banda, buscó ir más allá de una noche de tributo: “Tengo 15 años en la música y ocho años haciendo tributos a Caifanes solamente; para mí, Caifanes musicalizó mi vida desde muy joven, fueron una gran influencia, ya teníamos tiempo planteando la invitación para el maestro Marcovich, pero hasta este año pudimos realizarlo”.
Y así, el vocalista decidió compartir a su público y su escenario con el maestro cofundador de Caifanes, Alejandro Marcovich, quien platicó con EL UNIVERSAL Querétaro.
Marcovich y Omnia hicieron temblar el edificio con un set selecto, que incluyó canciones como: “Afuera”, “El año del dragón”, “Estás dormida”, “Aviéntame”, “Nubes”, “Ayer me dijo un ave”, “La negra Tomasa” y “El negro cósmico”, por mencionar algunas.
En Querétaro se revivieron todos los éxitos de Caifanes, donde se transformaron las canciones ya conocidas en canciones totalmente nuevas, con un espíritu tan potente como ya conocidas.
Creador de una maestría al improvisar en cada una de las piezas, habilidad que se ha construido con años de práctica y trabajo, dejó con la boca abierta a más de uno en este tributo que se volvió un gran concierto, que más de 100 personas disfrutaron en un evento íntimo, en el que de repente pareciera que Marcovich tocaba sólo para ti, mis ojos cerrados llevaban todos mis sentidos a las cuerdas de su guitarra plateada tan característica en sus conciertos, las notas y el requinto sonaban como plegarias en mi cabeza, en donde el dios esa noche era Marcovich.
¿Quién es Alejandro Marcovich?
—Es el tipo de pregunta que se requiere demasiado tiempo para tener una respuesta mínimamente sensata, no es una pregunta que tenía preparada. Es una pregunta de síntesis, pero de la manera más simpática podría decirte que soy un integrante más de la raza humana con una sola gracia como tocar la guitarra.
Maestro, ¿en qué está trabajando actualmente?
—Siempre estoy trabajando, ahora hay que hacer la mezcla de una pieza de hace 50 años de los Beatles que arreglé y es lo más reciente. De mis proyectos futuros ya hablaré después.
Notamos que usa constantemente una guitarra plateada en casi todas sus presentaciones, ¿tiene alguna historia con ella?
—Esta guitarra es el reemplazo de una que me robaron en Ciudad Juárez, era el mismo modelo, pero negra, la acompaña ese algo de: “soy la otra” [ríe divertido], pero nos hemos entendido bien, la he ajustado mucho hasta que me acostumbré a ella porque es un gran luto desprenderte de un instrumento al que estás muy bien acoplado, entonces, batallamos mucho para conseguir el mismo modelo, y esta es: la otra [y vuelve a reír pícaramente].A veces la otra es mejor que la otra... [y reímos todos] En este caso “la otra” no es la de la casa chica, es la que reemplazó a la otra que se murió [y el maestro ríe más relajado pese a su dolor de espalda]
—Espero que hayan disfrutado el concierto.
Mucho, es un tributo que se volvió un concierto
—Esto que hago yo, más que un tributo, es mi concierto, lo que hace Caifanes es parte de mi identidad porque yo ayudé a construir eso que son, ayudé a poder convocar tanta gente como lo hacen con la marca Caifanes, eso también me pertenece.
Sin embargo lo que hago en mis conciertos es algo más de Caifanes, es la improvisación, llevo muchos años desarrollándolo, es algo que he hecho desde la preparatoria, soy un musicólogo que también improviso, y eso no es muy común hoy en día, la gente que va a verme va a ver algo que trasciende el lenguaje de Caifanes. Es el lenguaje de Caifanes, pero algo mucho más allá a parte de mi identidad que esa es mía.
Maestro ha sido un parteaguas como identidad, un ícono del rock nacional, algo que ha marcado muchas generaciones.
—No hay un día que no aparezcan en mis redes, Ig, Fb, Tw, sobre todo adolescentes que aprenden y tocan solos míos y eso es el mayor orgullo para un artista, ser escuela, llenar estadios es una cosa, pero ser escuela no cualquiera. Esa es mi mayor satisfacción.
¿Qué es lo más importante para usted?
—Ser una influencia como artista, guitarrista y como ser huma