En Gilet, comunidad de Valencia, España, la artista mexicana Daniela Fernanda Becerril Cano descubrió “cientos de nopales creciendo de manera salvaje, infestados de grana cochinilla”, y comenzó un proyecto de recolección para trabajar con el pigmento que genera este insecto tan conocido en México. Y con grana cochinilla realizó un óleo de un doble paisaje, que fue seleccionado para participar en la XV Bienal de Florencia 2025.

Artista pinta con   grana cochinilla en España
Artista pinta con grana cochinilla en España

“La pintura con la que me seleccionaron para la Bienal de Florencia es un doble paisaje hecho con óleo de grana cochinilla, es por un paisaje mexicano y otro español, en el que a través del color intento generar una conexión entre estas dos latitudes, que es el pueblo de Temascalcingo, Estado de México, de donde es originaria mi familia, y el municipio de Gilet en la comunidad valenciana, en donde ahora me encuentro. Y a partir de esa pintura, con la que me seleccionaron, surge mi inquietud por trabajar con este pigmento”, explica la artista a EL UNIVERSAL Querétaro.

Becerril es originaria de la Ciudad de México, es egresada de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), y está por finalizar un máster en producción artística en la Universidad Politécnica de Valencia, con un proyecto sobre la grana cochinilla. Ha participado en múltiples muestras colectivas en diferentes ciudades de México, España y Francia; además de contar con tres exposiciones individuales.

Con su obra busca generar una conexión que surge a partir de la migración de las especies. “Me gustaría destacar la búsqueda identitaria a partir del uso del insecto de origen mexicano, la investigación sobre técnicas antiguas, prehispánicas para procesar el pigmento, tratar de reproducirlas y llevarlas a la contemporaneidad. A partir de esta investigación técnica y conceptual aprendí a generar obra que hable sobre la migración de las especies, la migración humana y la búsqueda identitaria que lleva el ser humano al alejarse de sus hogares”, dice.

La grana cochinilla es un insecto que crece como parásito en la planta del nopal, del cual se extrae el pigmento natural del rojo carmín. A partir de la extracción, Daniela genera obras bajo diferentes técnicas: pintura, escultura, cerámica y grabado.

En España, explica, el insecto es poco conocido. “La gente que lo conoce lo ubica en las Islas Canarias. El viaje histórico-migratorio de este insecto y de la planta del nopal, surge a partir de la Conquista, llega a las Islas Canarias en donde tanto el nopal como el insecto puede crecer en óptimas condiciones por el clima, porque no tiene ningún tipo de depredador. Actualmente siguen existiendo granjas que surten a la mayor parte de Europa y el mundo, la producción de este pigmento”.

A través del insecto, detalla, se conectan dos territorios situados en dos continentes. “Comparten una historia en común, así como unas condiciones climáticas cuyas circunstancias permitieron la migración del nopal. Al pintar un doble paisaje, mexicano y valenciano, se intenta representar esta conexión. El viaje de la cochinilla ilustra el enlace entre México, España y el movimiento de poblaciones”.

Además, Daniela crea prendas inspiradas en la industria textil que rodea a la grana cochinilla desde la época prehispánica; está realizada con algodón y porcelana de alta temperatura.

Google News