A Josefa Ortiz de Domínguez se le conoce como la heroína del movimiento de Independencia de México, la Madre de la Patria. Pero, ¿cómo es que una mujer que tiene 12 hijos, más dos hijos que ya tenía el marido, puede organizar unas tertulias de conspiración para derrocar un gobierno? Esa es la pregunta que lanza Erik de Luna, con su nuevo personaje.
“Porque tú puedes decir: ‘¡Ay no, yo que no tengo ni un hijo, qué me voy a meter en eso!’ ¿Quién en su sano juicio hace eso? Si tienes que encarrilar a los 12 hijos, darles de comer, y decirles: ¡No se peleen!, ¡No le jales el cabello a tu hermana! Ay, ya, olvídenlo, mejor voy a organizar la conspiración”.
Con su estilo bromista y socarrón, la Catrina de Erik de Luna personificará a doña Josefa Ortiz de Domínguez, “La Corregidora de Querétaro”, en el Festival de Tradiciones de Vida y Muerte 2023, que se llevará a cabo del 30 de octubre al 3 de noviembre en Xcaret, Quintana Roo, teniendo como estado invitado a Querétaro.
El espectáculo se llama La corregidora, o pa’ lenguas y campanas, las queretanas.
El monólogo que escribió el mismo Erik abarca la parte de la conspiración, describiendo cómo eran las tertulias en esa época: “Se rezaba el rosario, se comían dulces regionales, como el jamoncillo, luego se recitaba poesía, se hablaba de asuntos políticos, y obvio todo terminó en la conspiración”.
También hablará de la parte de ser madre de 14 hijos, y todo lo que tenía que enfrentar en aquella época, porque bien lo dice el mismo nombre del monólogo “pa’ lenguas y campanas, las queretanas”, haciendo referencia a lo chismosa que es la gente de la región.
“Las habladurías que debió aguantar, porque era la esposa del corregidor, y decían que andaba con Allende, todas las maledicencias, y es que aquí en Querétaro sí somos chismosones, y luego en esa época, y es que ella no era cualquier mujer, era la esposa del corregidor”.
También hará referencia a cómo era en esos tiempos la celebración de Día de Muertos, “porque de todo eso hay documentación”. Además, hablará de lo que significa ser un monumento, las bondades de ser un monumento y lo peor.
Erik de Luna ha personificado a su Catrina como Frida Kahlo, la emperatriz Carlota, y un personaje muy solicitado por sus seguidores era doña Josefa Ortiz de Domínguez.
En Xcaret, Erik es una estrella invitada del Festival Vida y Muerte desde hace varios años. Así que desde la pasada edición, le avisaron que Querétaro sería el estado invitado de 2023 y le hicieron la sugerencia de interpretar a “La corregidora”, así que este evento se perfiló como el ideal para finalmente presentar a la Catrina Josefa.
Y ahora, ¿cómo crear el personaje si no hay iconografía de doña Josefa?
“No, no hay iconografía de doña Josefa, están los billetes, las monedas, pero en realidad todas están de perfil, no hay pinturas ni otras imágenes, como por ejemplo del cura Hidalgo. De ella no. Así que con lo poco que hay empecé a construir al personaje”, indica.
En Querétaro existe un monumento dedicado a doña Josefa, en un espacio que justamente se llama Jardín Corregidora. Sobre esa idea del monumento que muestra a una mujer fuerte, levantando una antorcha, trabajó Erik el perfil de su nueva Catrina.
La tela que utilizó el mismo Erik para crear el vestuario es de color gris plomo, para simular el color que lucen las estatuas, en total fueron 32 metros de tela, y durante un mes se dedicó a confeccionar la vestimenta.
“Conseguí los aretitos en la Lagunilla, igualitos a los de doña Josefa, de filigrana, pero a mí unos aretitos así se me ven minúsculos, así que me hice unos grandotes con la misma idea de base, moño y lágrima”, detalla.
Durante el anuncio a la prensa del programa oficial del festival que se realizó en Xcaret, llegó por primera vez la Catrina Josefa, para dar un adelanto del espectáculo que ha preparado para el Festival de Tradiciones de Vida y Muerte 2023.
En Querétaro no se presentará ese mismo espectáculo de la Catrina Josefa. “Quizás un día me vista y salga a la calle para que la gente se tome su foto con ‘La corregidora’, quien pueda, y el que no, se la perdió”.
Antes de irse a Xcaret, hizo una sesión de fotos con el maestro Arturo Pérez, con quien Erik de Luna ha hecho mancuerna en otros proyectos. De hecho, Arturo Pérez es el fotógrafo que retrató a la Catrina para su primer calendario, con una impresión en blanco y negro.
En aquella sesión de fotos, la Catrina Josefa se paseó por los espacios de Plaza de Armas, frente a Palacio de Gobierno y los portales, lugares en donde seguro pasó aquella mujer que se entregó al ideal de vivir en una patria libre.
