Al fotógrafo argentino Daniel Mordzinski no le interesa retratar a los escritores en pose de pensador, frente a su biblioteca llena de libros viejos, lo que él quiere es retratarlos como ni ellos mismos se imaginan.
Los convence, mediante una especie de encantamiento, para subirse en andamios, meterse en la cama, en la bañera, entrar a escaparates de vestidos de quinceañera, llenarse de globos, y así los retrata.
En la edición del Hay Festival Querétaro 2022 se le vio en un rincón de la sala de prensa, retratando con su cámara a los invitados, luego de una breve plática, y varios objetos que les daba para manipular o ponerse en alguna parte del cuerpo, la fotografía estaba lista.
Su carrera fotográfica, pegada a la literatura, comenzó cuando retrató a Jorge Luis Borges, en Buenos Aires, Argentina, año 1978. Ya son más 40 años de fotografiar a escritores, cuatro décadas en la que ha logrado crear un “atlas humano” de la literatura hispanoamericana.