La defensa de un mamut fue encontrada por los pobladores de Huimilpan hace cinco años, pero es hasta ahora que el público puede disfrutar del maravilloso hallazgo, en la Casa de la Cultura J. Guadalupe Velázquez, en Huimilpan, donde autoridades municipales y del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) inauguraron la Sala Paleontológica y Arqueológica que alberga no sólo la milenaria defensa, sino otras otras piezas con altísimo valor arqueológico y patrimonial.
Fiorella Fenoglio, arqueóloga del centro INAH Querétaro, recuerda la importancia de preservar dichos hallazgos, pues son como las huellas dactilares de cada población, únicas e irrepetibles.
Reconoce que dichos hallazgos no serían posibles sin la ayuda de los ciudadanos de cada demarcación, en este caso de Huimilpan, que junto con Amealco y Corregidora son los municipios en donde más vestigios prehistóricos han aparecido.
“Hay piezas que no hemos podido extraer de su zona original y para su preservación confiamos mucho en las comunidades, hay muchísimos registros de vestigios, pero sacamos sólo las piezas que consideramos que están en riesgo. Nosotros siempre tratamos de ir a las comunidades, explicarles a las personas el valor que tienen los vestigios y la información que da para todo el país y explicamos por qué es importante que los conserven y los protejan, los ciudadanos son nuestros principales aliados”.
Detalló que desde hace años el Instituto Nacional de Antropología e Historia trabaja en capacitar a los ciudadanos para la preservación de vestigios, esto a través de talleres y charlas en las distintas comunidades. La respuesta de la gente ha sido magnífica, comenta.
“Desde 2012 tenemos un proyecto en el que íbamos municipio por municipio para explicar el patrimonio de Querétaro, la respuesta fue impresionante, les dijimos a los habitantes los vestigios que tenían en su comunidad y de inmediato comenzaron a denunciar sobre nuevos descubrimientos de huesos, etcétera, la gente comprende la importancia de su patrimonio, ellos mismos son los que detectan los riesgos y nos dan aviso. En cuanto la gente conoce el tema, lo valora y lo protege”.
En la Casa de Cultura el ambiente es de fiesta, los vecinos curiosos por la presencia de las autoridades se acercan a la sala recién inaugurada y observan las piezas colocadas sobre camas de arena. Leen las indicaciones, toman fotografías y tal vez las comparten en sus redes sociales. La presencia invisible de aquel mamut vive todavía en su defensa, en su mandíbula, en sus costillas, en cada una de las piezas exhibidas en la sala, y eso embriaga a los visitantes.
Algunas personas acuden con el personal del INAH y con cierta timidez les muestran algunos hallazgos encontrados en sus casas o en sus parcelas; parecen huesos, aunque sumamente maltratados por la humedad, los arqueólogos los analizan y acuerdan una próxima reunión, agradecen la colaboración de los ciudadanos.
Las autoridades también inauguraron la segunda sala del Museo Comunitario, llamada Evocaciones del Pasado y Presente, en la comunidad de San Pedro. En ella se presenta otra defensa de mamut, pero también fragmentos de instrumentos de cocina y pinturas rupestres, en esta sala todo lo que hable de la historia de San Pedro cuenta.
Fiorella Fenoglio reitera que los ciudadanos son la pieza esencial para la recolección y preservación de cada uno de los objetos exhibidos, por lo que pide a los gobiernos no ser indiferentes ante la riqueza cultural que todavía yace sepultada metros bajo tierra; pide destinar recursos para la búsqueda, restauración, preservación y exposición de todo tipo de vestigios.
“El INAH tiene recursos etiquetados por el gobierno federal, pero no es suficiente, por eso siempre pedimos el apoyo de los gobiernos y desgraciadamente es algo muy difícil, los gobiernos entran y salen sin que se concrete un apoyo real o significativo, aunque sí hay autoridades que nos han apoyado, siempre estamos en este tira y afloja”.
“Depende mucho de las voluntades, de la persona que esté en el gobierno, les pediría que se den cuenta de la importancia de preservar el patrimonio, que se creen espacios dignos para que la gente pueda acercarse y conocerlos, porque en eso está nuestra identidad”, expresa.