Más de 100 años de herencia cultural tiene el traje que, por encargo de la maestra Aurora Zúñiga, doña Camila González (la güela ndehe) confeccionó en pura lana, recordando la forma en que su madre y su abuela lo portaban, imprimiendo y dejando una evidencia textil de la cultura y tradiciones del municipio de Amealco.
Amante de la cultura, tradiciones y por supuesto incansable investigadora del folklor queretano, la maestra Aurora al conocer a la señora Alberta, nuera de doña Camila, amablemente le pide contactar a esta famosa tejedora, para que le confeccione este invaluable traje. Es así como la directora honorífica de la Compañía Folklórica de la Universidad Autónoma de Querétaro consigue tener el traje antiguo típico de la comunidad de San Ildefonso, añadiendo otro artículo más a su amplia colección de la cultura y linaje queretano a través de los años.
En la sala de su hogar, Aurora recibe a la artesana María Isabel Pascual, bisnieta de doña Camila, la güela ndehe: famosa tejedora, bordadora, partera y agrícola oriunda de San Ildefonso, Amealco.
María Isabel describe su emoción al saber que existía todavía una creación textil de su bisabuela: “Estaba muy emocionada de saber que de mi familia se dejó hecho con sus manos un trabajo que tiene más de 100 años. Cuando yo lo vi quise uno pero ya es muy difícil porque la gente que lo trabajaba ya murió”.
Las piezas que conforman este atuendo típico son el rebozo, el quechquémitl, el delantal y la enagua, todos hechos de lana tejidos en telar de cintura, la nagua de manta con bordados de hilván y una camisa de forma cuadrada que tenía alforzas para distinguir los bordados, también en hilván, uno de otro.
El quechquémitl, que aunque en la actualidad se teje en materiales sintéticos y lucen barbas de lana en la parte inferior, es la única prenda remanente que las habitantes de dicha comunidad portan con sus atuendos modernos.