Ataviado como la Catrina Pastora, Erik de Luna fue el encargado de concluir —en Plaza de Armas— la tercera edición del Festival Internacional de Artes Escénicas, a través de su espectáculo La Muerte y el regateo.
Poco antes de las 20:00 horas, público de todas las edades ocupó sus lugares para presenciar un divertido monólogo, en el que el personaje de la Catrina trata de regatearle a siete marchantes de artesanías tradicionales propias del Día de Muertos, con diferentes y rebuscadas tácticas, que hicieron a más de uno soltar la carcajada.
Antes de arrancar con el espectáculo, la secretaria de Cultura de Querétaro, Paulina Aguado dio el discurso de cierre del festival, en el que durante 13 días consecutivos de actividad artística, 922 artistas locales, nacionales e internacionales, ofrecieron al público 100 presentaciones gratuitas de danza, teatro, ópera y circo.
“Quiero comentarles que llegamos a cerca de los 170 mil espectadores, con ello realizamos alrededor de 100 espléndidas funciones que convirtieron a Querétaro en un referente nacional e internacional, donde la cultura se vivió a través del esfuerzo y dedicación de todas las compañías y creadores que enriquecieron el programa de esta edición; 13 días con la participación de 922 artistas, 809 de ellos orgullosamente locales”, declaró la funcionaria.
En esta edición, 27 recintos públicos como Plaza de Armas, el Museo de la Ciudad, el Centro de las Artes de Querétaro y el Teatro de la Ciudad, albergaron las presentaciones programadas, en la que artistas de Canadá, Estados Unidos, México, Costa Rica, Cuba, Francia, Polonia, Alemania, Italia, Japón e India inspiraron los aplausos y el clamor del público.
En un colorido desfile, siete jóvenes caracterizados de comerciantes caminaron entre el público hasta el escenario, llevando consigo artesanías típicas de la región, así como elementos tradicionales para el altar de muertos como máscaras, flores de cempasúchil, esqueletos de papel maché, calaveras de barro, muñecas de cartón “Miss Lupita”, alfeñiques y pan de muerto.
“Esta noche les voy a enseñar cómo se regatea, ¿alguien ha regateado?”, preguntó la Catrina minutos después de aparecer frente al público, luciendo el traje tradicional que las mujeres amealcenses de la cultura Hñahñu portan para la danza de Las Pastoras.
“¡Regatones!”, dijo con tono hilarante el personaje, luego de que centenares de personas alzaran la mano entre risas.
“Eso es una mala costumbre, no se debe de hacer (…) Pero si a todos nos gusta regatear tenemos que aprender las artes del regateo, porque no nada más es llegar así de ‘déjemelo más barato’, hay tácticas amiguis”, prosiguió Erick de Luna, cargando con un canasto de mimbre, en el que se vislumbraban las típicas muñecas de Amealco, reconocidas recientemente como Patrimonio Cultural de Querétaro.
Durante la presentación, el artista traspasó la cuarta pared para sumergir a los asistentes en esta cómica historia, en la que además de abordar el problema del regateo, hizo algunos guiños sobre el posible aumento del transporte público en la entidad y mencionó el próximo nombramiento de El Tepetate como “Barrio Mágico”, por el municipio de Querétaro.
Finalmente cerró el programa regalando al público las muñecas tradicionales de su canasta y coloridas diademas, además invitó a los asistentes a formar parte de la temporada teatral por el Día de Muertos de Cómicos de la Legua, en la que se presentará la obra Nezahualcóyotl.
“Vamos a tener como primer acto el show de La Doña Catrina y luego Nezahualcóyotl, con plumajes y todos los poemas”, anunció.