La historia de Mulata, novela de Alexandra Lobato, comenzó hace 13 años con un sueño que despertó a media madrugada a la escritora. La novela que evoca un mundo femenino en pleno virreinato, vivió varios periodos de olvido, hasta que finalmente Alexandra le puso punto final, y en gran medida fue porque Dalia Larisa J. Otero y Carlos Campos, del Consejo Literario Queretano, le insistieron en entregar el proyecto para abrir la primera serie de publicaciones del sello Letra Capital. “Y no nos equivocamos”, dice la misma Dalia. Ahora Mulata ya se prepara para ir al cine, de la mano de Dora Guzmán.
En el marco de la FILMAQ, Alexandra Lobato presentó Mulata, acompañada de Dalia Larisa. Ahí la escritora compartió que recibió tres propuestas para llevar su novela al cine, pero se decidió a trabajar con Dora Guzmán, misma directora de la película Sara.
Como aperitivo, primero realizarán un cortometraje basado en el personaje de Antonia, una de las mujeres destacadas de Mulata, “una chiquita de 15 años que a su edad tiene alas muy grandes, en un mundo muy pequeño y decide tomar una decisión muy radical que va a costar altos precios en su vida, es una historia dentro de la misma historia”, describe la autora.
Lobato es también la encargada de escribir el guión de dicho cortometraje, aunque dice que no es su oficio, sí tiene el conocimiento por sus estudios literarios y porque le gusta el cine y cada película la observa a detalle.
El cortometraje será el comienzo del proyecto fílmico que, dentro de dos años y medio, pretende finalizar en una película.
Además, Mulata tendrá una nueva edición. En diciembre del año pasado se publicó la novela de Ale Lobato, y a la fecha se agotaron los ejemplares de Letra Capital, sello de la Secretaría de Cultura del Municipio de Querétaro. La autora realizó los trámites para su publicación a través de Amazon, en donde se puede conseguir a la fecha.
La segunda edición será publicada con el sello El barco ebrio de la librería Caligari de Puebla, y su impresión tendrá litografías con imágenes de la época.
Mulata nació por el inquietante sueño que despertó una madrugada a su autora. En ese tiempo, hace 13 años atrás, Ale estaba dando clases de historia del virreinato.
“Soñé que yo era una mulata y que me arrebatan a mi bebé, yo estaba jugando con un niño muy blanco, que era mi hijo, yo siendo mulata, pero llega un militar del ejército realista y me arrebata al niño, en ese instante yo me despierto y caigo en pánico, por la sensación de que te arrebaten a un hijo, y caigo en cuenta de que la escena es el corazón de una historia”.
De las tres a las seis de la mañana, escribió un primer capítulo que hoy forma parte de Mulata. Después se dedicó a investigar detalles históricos para no caer en impresiones respecto a la época. A tal grado llegó su investigación que se fue a una hacienda de San Juan del Río, hoy convertido en un hotel, para vivir la experiencia de estar en un inmueble colonial.
No realizó una investigación familiar en busca de indagar, de quiénes de sus ancestras provenía tal sueño. El universo femenino que comparte en Mulata se recreó retomando la figura de mujeres con las que convivió, como su madre y sus abuelas. “Mi universo es muy femenino y mis personajes siempre han sido femeninos”.
Y aunque presenta ideas del mundo femenino y feminista, su novela no es una obra que no aleja al hombre de su lectura, “sino que presenta la complejidad del ser humano”.
Catalina es una de las cuatro mujeres de Mulata, es una española casada que viene al bajío a vivir, pero con ideas muy adelantadas a su época. “Gregoria esclava fiel pero vengativa; Ana, joven e impresionable, y María Isabel, la mulata en cuyos hombros recae el peso de las normas sociales virreinales”, se lee en la contraportada del libro.
Desde que aprendió a escribir, Ale no ha dejado de juntar palabras y contar historias. “Escribo por pulsión, siempre estoy escribiendo”, cuenta. Es licenciada y maestra en Filosofía por la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), cuenta con diplomados en Creación Literaria en la SOGEM Fue docente de nivel medio superior y superior de Filosofía, Historia y Literatura.
Es autora de Otro libro de sexo (Casa Blanca ediciones, 2021). Obtuvo el tercer lugar del Concurso de Cuento Ignacio Padilla 2017. Y publicó una novela por entregas en la revista de la Facultad de Filosofía de la UAQ. En espera de la nueva edición de Mulata, Lobato sigue y seguirá escribiendo.