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“La poesía nos ha salvado”, expresaron Martha Favila, Gabriela Aguirre y Rocío G. Benítez, al compartir su obra en el Centro Penitenciario Femenil de Querétaro, en una actividad que se realizó para conmemorar el Día de la Mujer.
Las escritoras fueron invitadas, a través de la Secretaría de Cultura de Querétaro y la Red Estatal de Bibliotecas, para hablar de su experiencia personal con la literatura, sus motivaciones para escribir y de cómo llevan al poema temas de amor, separación, dolor y violencia.
Martha Favila, autora de los libros La frente de las cosas y Marca de agua, fue la primera en tomar el micrófono en este evento, en el que participaron 131 mujeres privadas de su libertad. La poeta platicó que desde niña se sintió atraída por las artes, especialmente por la música, pero encontró en la escritura la mejor forma de expresar sus emociones. Martha, además de la escritura, apoya a visibilizar el ejercicio literario de las mujeres que radican en la entidad, a través del encuentro Lumbre entre las hojas, que apoya la Secretaría de Cultura de Querétaro.
“Escribir salva”, dijo Martha, previo a la lectura de sus poemas, y esas mismas palabras coincidieron en voz de Gabriela y Rocío, al explicar lo que para ellas significa hacer literatura.
Gabriela Aguirre, miembro del Sistema Nacional de Creadores del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (FONCA), ganadora del Premio Nacional de Poesía Joven “Elías Nandino” y Premio Nacional de Poesía “Enriqueta Ochoa”, leyó poemas de los libros El lugar equivocado de las cosas y La frontera: un cuerpo.
Aunque la poeta ya tenía la experiencia de compartir su obra y sus conocimientos literarios en el Centro Penitenciario Varonil, en donde hace más de 10 años impartió un taller a internos, describió esta visita como una vivencia muy emotiva e inolvidable.
“Fue un encuentro con la hija que soy, con la madre que no soy, con la chavita que fui, con la mujer enamorada que siempre he sido. Todo en un lugar como ese: lleno de rejas y candados, pero también de alcatraces y aire fresco. Tocar las palabras y con las manos unas manos como las mías: de mujer en toda la extensión de la palabra”, expresó Gabriela, con su inevitable lenguaje poético.
Rocío G. Benítez, periodista y poeta, leyó obra de su poemario Muina y de su proyecto Eso tan terrible lleno de hermosura, obra que habla sobre feminicidios y la violencia de género, que escribió en el 2018 con apoyo del Programa de Estímulo a la Creación y al Desarrollo Artístico (PECDA).
Al final de la lectura, las poetas entregaron los libros que llevaron como regalo y que autografiaron a las mujeres que se acercaron, ese momento sirvió para platicar algunos minutos con las internas, quienes agradecieron la lectura y sobre todo, compartir detalles íntimos y dolorosos del origen de sus poemas.
La conmemoración del Día Internacional de la Mujer en el Centro Penitenciario Femenil de Querétaro concluyó con una dinámica de fomento a la lectura, una obra de teatro y presentación de danza polinesias. Redacción
