Más Información
El órgano es un instrumento que posee una gran belleza plástica y sonora (…)lo que los convirtió en el instrumento musical más sofisticado de cualquier época.
Gustavo Delgado Parra, compositor y concertista
“Los órganos de Santa Rosa de Viterbo, Santiago y San Antonio, hoy por hoy son los más representativos de la organería queretana”, afirma el compositor Gustavo Delgado Parra, quien también manifiesta que en la entidad “no se cuenta con un censo pormenorizado del patrimonio de órganos históricos”, lo que dificulta la posibilidad de hacer una categorización.
Explica que estos instrumentos se concentran, fundamentalmente, en la zona centro-sur del país, siendo la región del Bajío una de las más representativas, “y, por supuesto, Querétaro llegó a contar con un importante patrimonio de órganos; sin embargo, son relativamente pocos los que se conservan al día de hoy”.
Como extensión del Festival Internacional del Órgano Barroco —del que es fundador—, Delgado Parra se ha presentado en Querétaro, en el órgano de Santa Rosa de Viterbo, también participó en festivales locales en el órgano de Santiago, San Agustín, La Congregación y la Catedral.
Ante la pandemia, ha implementado una nueva estrategia que consiste en la “transmisión de los conciertos de manera virtual, lo que ha permitido acercar estos instrumentos, que frecuentemente se encuentran en comunidades apartadas, a un público nacional e incluso internacional, lo cual ha tenido muy buena aceptación, ampliando considerablemente el público receptor”.
Para el también docente y concertista, “desafortunadamente la cultura del órgano histórico cayó casi en el abandono a principios del siglo XX, por lo que la brecha ha sido tan grande, que seguramente tomará algunas décadas más el lograr hacer conciencia de lo que este patrimonio significa como parte de nuestra herencia cultural tangible e intangible”.
Delgado Parra se ha distinguido por sus múltiples aportaciones y su actuación decidida y constante por colocar al órgano en las nuevas estéticas del mundo del arte.
En este sentido, destaca la importancia de fomentar “la creación de nuevo repertorio para este instrumento, pues de la misma manera que el órgano es reflejo de los conjuntos instrumentales de su época, también han registrado y producido música de su tiempo y de su entorno cultural, por lo que se tiene que estimular la creación de nuevo repertorio por parte de los compositores mexicanos”.
“Para la Iglesia no ha sido tarea fácil el poseer una herencia musical tan importante —señala el reconocido organista y musicólogo—; sin embargo, hemos logrado contar con su apoyo, especialmente con la orden de padres agustinos, quienes han apoyado de alguna manera nuestro trabajo desde sus orígenes, habiendo logrado la creación del Centro del órgano AMMAO-San Agustín (Polanco, CDMX)”.
Agrega que “dentro de la liturgia, el órgano nos acompaña en eventos significativos de nuestras vidas: cuando nacemos (bautizos), en nuestra boda y en nuestro funeral… El órgano se ha desarrollado por siglos en la iglesia, por lo que la gran mayoría del repertorio para este instrumento se trata de música sacra”.
Para este artista, “el órgano se convirtió en el instrumento oficial de la Iglesia cristiana desde el siglo XII, por lo que el desarrollo de este instrumento, así como la gran mayoría del repertorio compuesto para el órgano, tienen que ver con la cultura religiosa en sí misma, y de hecho, en algunos períodos como en el renacimiento y el barroco, el desarrollo cultural giraba en torno a la Iglesia, así que estamos hablando de un binomio indisoluble, los órganos históricos son a la vez “objetos de culto y de cultura”.
Sin duda, la trayectoria de Gustavo Delgado Parra acredita sus méritos en la exaltación de la cultura y los valores de México.