Son cinco líneas de trabajo las que propone la mesa de representantes 2021-2022 del Consejo Consultivo de Teatro (CCT) de Querétaro, y dentro de su plan destaca la creación del Protocolo de Violencia de Género y transparencia de recursos, para este segundo punto se ha propuesto con urgencia una Contraloría Social que vigile el uso de recursos públicos destinados a proyectos de teatro y explorar mecanismo de Presupuesto Participativo.
Los actores y directores teatrales, Luzma Anguiano, Manya Loria, Diego Ugalde, Paco Granados y Enrique Guillén, son los representantes del CCT, y tuvieron, a principios de junio, su primera reunión oficial con personal de la Secretaría de Cultura del Estado de Querétaro para abordar su plan de trabajo.
En un documento dirigido a la comunidad, emitido el pasado 18 de junio de 2021, se detalla que en la reunión presentaron el plan provisional de pasos a seguir para la elaboración del Protocolo de Violencia de Género.
Sobre este tema, Luis Omar Tellez, jefe de la Unidad de Apoyo Administrativo de la Secretaría de Cultura de la entidad, dijo “que no siempre se llevan a cabo las denuncias por violencia de género, ya que en el Buzón de Quejas de la Secretaría de Cultura no se han recibido quejas de este tipo en lo que va de la administración, la única que se recibió, al final la persona que presentó la queja no prosiguió la denuncia”, detalla el informe.
El proyecto del protocolo, se le explicó, buscará generar las condiciones para que los denunciantes se sientan seguros, y puedan tener el acompañamiento adecuado. De parte de la Secretaría se propuso la vinculación con el Instituto Queretano de la Mujer y se nombró a Rodrigo Real, coordinador de Promoción de Festivales, como enlace de la institución para colaborar en el desarrollo del protocolo.
Sobre el tema de transparencia en el uso de recursos y acceso a la información, el Consejo Consultivo de Teatro pidió a la Secretaría de Cultura de la entidad “aclarar una serie de órdenes de compra disponibles en el Portal de Transparencia del Estado de Querétaro, que plantean serias dudas sobre el ejercicio equitativo de los recursos. Se expuso incluso que existen órdenes de compra que hacen referencia a presentaciones teatrales que no fueron anunciadas en las redes de la Secretaría, de los espacios donde debieron haberse presentado o de los grupos a los que se contrataron. Si bien no obtuvimos ninguna respuesta a dichos cuestionamientos, se nos planteó que podríamos realizar una solicitud de información. La solicitud fue ingresada de manera oficial el 9 de junio de 2021, y a la fecha del día de hoy no se ha recibido ninguna respuesta”, detallan.
Y como probables soluciones a dicho tema, plantearon crear con urgencia una Contraloría Social que vigile el uso de recursos públicos destinados a la actividad teatral y explorar mecanismo de Presupuesto Participativo.
En otro documento emitido a la misma comunidad teatral se hace referencia a la crisis que desató la pandemia, y que golpeó duramente al gremio del teatro de Querétaro.
“Muchos teatros independientes tuvieron que cerrar sus puertas y fueron muchos los compañeros en situaciones económicas más que difíciles. Aun así, no es tiempo de mirar al teatro como una víctima más de esta pandemia, porque el teatro no ha muerto, resiste de nuevo”, dice el Consejo Consultivo de Teatro de Querétaro.
El texto también hace referencia a las pasadas campañas políticas, en donde recibieron invitaciones para reunirse con candidatos y escuchar sus propuestas.
“Ahora es nuestro turno de invitarles. La comunidad teatral organizada de Querétaro está lista para tener reuniones de diálogo real con los candidatos, organizaciones, comunidades, individuos o instituciones que consideren pertinente construir una conversación alrededor del teatro como actividad esencial, como herramienta para afrontar las crisis”, destacan.
Y para abrir el diálogo, el CCT hace referencia a sus cinco líneas: El teatro como espacio de lucha contra la violencia de género. El teatro como espacio de trabajo digno para todos los creadores escénicos. El teatro como espacio de descentralización y ejercicio del derecho humano a la cultura. La revalorización del teatro como actividad esencial, y el teatro como espacio de formación, profesionalización y proyección.
