El mes pasado se estrenó en la Sierra Gorda el montaje Hacia el Este... Raising Up!, obra de Miguel Loyola en la que participan niñas, niños y adolescentes de Purísima de Arista, comunidad del municipio de Arroyo Seco. El proyecto teatral aborda el tema de la migración, buscan traerlo a Querétaro, presentarlo en San Juan del Río y Baja California.
La protagonista de la historia es una pequeña que acaba de arribar de Estados Unidos, y la interpreta una niña que recién llegó a la Sierra Gorda del país norteamericano. La protagonista habla spanglish, nada extraño en la comunidad porque es parte del fenómeno de migración que se vive en esta zona de Querétaro; y es una niña que se enfrenta al choque cultural, pero también se enfrenta a la adolescencia, en medio de todo tiene que buscar su propio camino.
Con la dramaturgia de Miguel Loyola, sumando su dirección al trabajo de Niyura Delgado y Adrián Palomo, se estrenó en el Día Mundial del Teatro Hacia el Este... Raising Up!, en homenaje a Anatolia Martínez Alvarado, docente, promotora cultural, conocida y respetada en la Sierra.
El elenco lo integran: Mía González Chavero, Valeriana Mendoza, Emmanuel Castillo Chávez, Regina Guadalupe Pérez Marín, Miriam Dolores Zúñiga, Alberto Vega Castillo, Jocelyn Ávila Ángel, Fátima Nicolle Palacios, y Alexander Yáñez Otero.
Con Hacia el Este... Raising Up!, Loyola cumple 10 años de realizar teatro comunitario, un proyecto que le ha permitido no sólo conocer un modo distinto de hacer teatro, sino una vida diferente a la ciudad, aprendiendo de lealtad, discreción y el valor que tiene la palabra de honor.
Los conocimientos adquiridos durante esta década serán parte de un libro, donde Miguel detallará el trabajo de la dramaturgia en el teatro comunitario, y estará listo para el próximo año.
De los niños que participaron en la primera obra de Miguel dedicada al teatro comunitario, Ulises y las flores del sol, dos de ellos se unieron a Hacia el Este...
“Emmanuel y Joselyn estuvieron desde el principio, y ellos ya pueden compartir con los menores la experiencia que hemos vivido; se necesitan 10 años para que un proyecto como este comience a funcionar por sí mismo, a veces nos hace falta comprender que, para realmente empoderar a los niños o a cualquier otro grupo, va a tomar tiempo, se necesita toda la praxis, porque la teoría no resuelve nada, la praxis es lo que resuelve, con los mayores ahora puedo hablar muchas cuestiones teóricas que entienden porque las han vivido primero”.
De los demás niños que iniciaron con el proyecto de teatro comunitario, Miguel cuenta que algunos ya cursan sus estudios universitarios, y otros se han enfocado en formar una familia.
“Con el tiempo también entendí que sí abres un panorama a los niños, pero finalmente no puedes cambiarlos, el proyecto también es respetarlos y respetar el entorno, hay cosas que para la ciudad no son comprensibles, lo único que puedes dar al niño son herramientas para que puedan dialogar y ellos decidan de qué manera evoluciona su propio entorno comunitario”.
El proyecto del nuevo montaje comenzó en noviembre del 2021, Niyura Delgado y Adrián Palomo trabajaron primero con los niños, y los actores entrevistaron a la maestra Anatolia.
La dramaturgia, detalla Miguel, se realizó como una especie de rompecabezas, que se fue armando con palabras que los niños pronuncian durante el aprendizaje, “y que si se dan cuenta hay algunas cosas de sintaxis que no se corrigen, porque es parte de como hablan ellos, lo importante es destacar su voz”, agrega Loyola, quien divide su tiempo entre Querétaro y Nueva York, a donde viaja a especializarse y ya hace nuevos proyectos, uno de ellos es una dramaturgia con repartidores latinos.