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"Andaré por las calles de Tequisquiapan ofreciendo marisquitos preparados, no los doy caros y los llevo frescos", con este mensaje un joven se llevó los aplausos y el reconocimiento de los internautas.
Rafael Morales publicó en Facebook unas fotografías de los cocteles a la venta y de él montado en su bicicleta, listo para recorrer las calles del Pueblo Mágico.
Al posteo, los internautas respondieron con mensajes positivos para reconocer la actitud emprendedora y positiva del joven de 21 años.
"La idea de vender mariscos y entregarlos hasta su ubicación surgió porque buscaba una manera llamativa y cómoda para las demás personas y apoyaran el trabajo local. Tequisquiapan es un lugar en dónde la venta de mariscos no es tan recurrente, y algunas veces un tanto costosa, mi idea es ofrecer comida a buen precio, casera y un poco diferente", comentó Rafael a El Universal Querétaro.
A primera hora del día, el universitario prepara cada uno de los cocteles que coloca en su mochila:
"Yo los preparo pues es lo que quería aprender, entonces también les pregunto a mis clientes que si algo no les gusta con toda confianza me digan para ir mejorando preparando esto", agrega.
La vida de estudiante universitario
Rafael vende los cocteles en 60 pesos, tienen camarones, verdura y salsa para aderezar, y con la venta cubre sus gastos como estudiante de neurociencias en la Universidad Nacional Autónoma de México, UNAM:
"Si es de su agrado contribuir a la ayuda de algunos gastos escolares de este joven. Con un chiflido volteo aunque solo sea para saludar", dice en la red social.
"Esta pequeña idea de vender surgió porque próximamente se acercan la clases presenciales y conlleva principalmente un gasto inicial un poco pesado por la renta de cuarto", relata el universitario a El Universal Querétaro.
Un joven agradecido
Los habitantes y turistas de la zona ya son fieles compradores de los cocteles desde el pasado 12 de julio, cuando Rafael compartió sus fotografías en redes sociales.
"Me encontrarán en las calles céntricas de Tequisquiapan ofreciendo a domicilio este tipo de comida. Me alegra y me motiva ver cuando la gente termina feliz, es un bello gesto por parte de las personas, el que han hecho por mi dándole difusión y comprando personalmente, yo por mi parte lo hago de buen corazón", finaliza.
