La mañana de este lunes se tuvo a un sujeto como al probable responsable de privar la de vida a Athos y Tango, dos caninos, que formaban parte del equipo de rescatistas en el estado de Querétaro.
La información la dio a conocer la Fiscalía General del Estado (FGE), instancia que en un breve comunicado detalló que el sujeto detenido será presentado ante la autoridad judicial que lo requiere, para que se defina su situación jurídica.
Recordó que se ejecutó una orden de aprehensión en contra del imputado por presuntamente privar de la vida a dos caninos, que formaban parte del equipo de rescatistas en el estado de Querétaro.
El 13 de junio, se recordó, la FGE inició una carpeta de investigación, por la muerte de Athos y Tango, quienes presuntamente fueron envenenamiento en la vía pública cuando se dirigían al parque donde diariamente realizaban sus entrenamientos.
“Los perros mordieron una salchicha, el instinto es algo muy fuerte y la persona que dejó estos alimentos allí sabía que iban a sentirse atraídos por el olor”, dijo Andrés Juárez Morales, coordinador estatal de Socorros de Cruz Roja Mexicana en Querétaro a EL UNIVERSAL Querétaro el pasado 16 de junio.
Por estos hechos, Edgar Martínez, adiestrador de ambos caninos, presentó una denuncia ante la FGE.
Posterior a la denuncia por parte del cuidador de los caninos, se realizó un acto de investigación en la colonia Panamericano, de la capital del estado.
Con los indicios recabados en el cateo y la plena identificación de imputado, se solicitó y obtuvo la orden de aprehensión; misma que fue cumplimentada la mañana de este lunes.
El imputado, será presentado en audiencia inicial, en la que, en presencia de su defensa, escuchará los datos de prueba en su contra.
De acuerdo a lo que establece el código penal, el imputado en caso de resultar culpable, se le podría imponer una sanción que va de tres a 5 años de prisión y una multa económica que va 500 a 700 UMAs.
De acuerdo a información de Cruz Roja Querétaro, "Athos”, de raza Border Collie y de aproximadamente 4 años de edad, estaba en el top cinco a nivel nacional entre los perros certificados ante la Organización Internacional de Perros de Búsqueda y Rescate (IRO), y también era un especialista acreditado ante la Cruz Roja Mexicana en Búsqueda y Rescate Urbano (USAR).
Mientras que Tango era un pequeño Yorkshire que igualmente formaba parte de las filas de Cruz Roja Mexicana en Querétaro, y cuya labor era de terapia y asistencia emocional, que por su carácter dócil y gentil, apoyó durante años a personas con traumas y conmociones, con altos niveles de estrés y de ansiedad después de vivir algún suceso trágico.