Es cierto que hasta hace algún tiempo, muchos trabajadores se sentían amenazados por sentir que podrían ser remplazados por la Inteligencia Artificial (IA). Sin embargo, la IA se ha convertido en una herramienta poderosa que puede ayudar a trabajar de manera más eficiente y efectiva.

Esto lo reafirma un reciente informe de Microsoft titulado “Índice de Tendencias Laborales 2023”, el cual indica que actualmente las compañías están dos veces más interesadas en utilizar esta herramienta tecnológica para aumentar la productividad, en vez de reducir su plantilla laboral.

Cabe mencionar que esto también lo piensan los colaboradores. Es decir, los empleados están más confiados de que la IA puede ayudarles a disminuir la carga de trabajo, que pensando en que pueden perder el empleo por la aplicación de ésta.

En el contexto del Día del Trabajo me parece muy relevante hablar de la interrelación entre la IA y los trabajadores de primera línea, denominados también frontline workers, y que suponen el 80% de la fuerza laboral en el mundo, según el informe The rise of the deskless workforce, realizado por la compañía Emergence.

En este sector podemos encontrar desde enfermeros, comerciales, repartidores, personal en punto de venta, trabajadores de la construcción, responsables de tiendas, entre otros.

En fin, son quienes se encargan de llevar a cabo funciones críticas para la producción, servicio o atención al cliente, y prácticamente, son la columna vertebral de una empresa.

Sin embargo, es precisamente ahí en este sector, donde la Inteligencia Artificial podría ser de gran ayuda y no se está aprovechando.

Un estudio de Harvard Business Review revela que el 86% de los empleados de primera línea desean contar con una mejor tecnología.

Y justo Nomara Parra, cofundadora de Ozaru, una empresa mexicana pionera en temas de Inteligencia Artificial (AI), enfocada a eficientar las operaciones de primera línea de las empresas, me hablaba de la gran área de oportunidad que existe de democratizar la Inteligencia Artificial. Con esto se refiere a acercar la tecnología en pro de agilizar los procesos, aumentar la productividad, e incluso, impulsar el bienestar de los trabajadores.

Y es que, la combinación de herramientas tecnológicas, como la IA y la data obtenida de las actividades diarias, puede ayudar a los trabajadores y a las empresas a tomar mejores decisiones, dando como resultado un mayor agilidad operativa, impactando además en las ventas y los procesos diarios.

Los fundadores de Ozaru crearon una herramienta llamada AI Supervisor que ayuda a eficientar las labores diarias de los trabajadores de primera línea de las empresas, quienes no cuentan con acceso a equipos de cómputo y su principal herramienta de trabajo es un celular.

Con AI Supervisor, en tiempo real se puede supervisar, de una manera más sencilla y con ayuda de la Inteligencia Artificial (AI), que cada uno de los trabajadores de primera línea cumplan con sus labores o tareas de forma adecuada, de forma fácil, porque además “vive” en una versión de Whatsapp.

Parece mentira, pero la realidad es que en pleno 2024 los trabajadores siguen utilizando en su mayoría, lápiz y papel para llevar a cabo sus actividades, sin aprovechar el grandioso potencial que tiene la tecnología para simplificar las complejidades de la vida laboral.

Por ofrecer un dato, el AI Supervisor permite ahorrar hasta 800 horas en Staff de supervisión, reduce a la mitad los costos de onboarding, entrenamiento y soporte, y ayuda a resolver 10 veces más rápido dudas que surgen en el día a día sin necesidad de que una persona intervenga para resolverlas. La gran pregunta es ¿qué tanto estamos aprovechando la AI en las organizaciones?

@finanzasentacon

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